Cuatro años de Desde la ciudad sin cines

Publicado el 25 julio 2013 por David Pérez Vega @DavidPerezVeg
En julio de 2009, exactamente el día 21, comencé a escribir en Desde la ciudad sin cines. Por tanto esta semana se ha cumplido el cuarto aniversario del blog. Ya he contado que en esto de comentar libros en internet empecé en un foro dedicado a Roberto Bolaño dos años antes; en junio de 2007, creo. En aquel foro, tal vez una docena de personas, hablábamos de libros de este autor y de otros relacionados con él. El foro, que funcionaba dentro de la web del Fnac, fue clausurado sin avisar a nadie. Cuando la gestión de la obra de Bolaño la tomó Andrew Wylie –el chacal de los agentes literarios- pidió a la Fnac que cerrase esa página. Creo que esto ocurrió sobre marzo de 2009.
Me lo pasaba bien escribiendo en aquel foro, y con su cierre empezó a cobrar fuerza la idea de abrir un blog literario, centrado en las reseñas. Me lo pensé: temía que fuese a ocupar una porción demasiado importante del tiempo libre que normalmente dedico a escribir de forma creativa. Pero cuando acabó ese curso académico (soy profesor, como he contado muchas veces) la idea empezó a cobrar más fuerza. Y ese 21 de julio por fin decidí probar. Escribí en Word una reseña sobre El lamento de Portnoy de Philip Roth, y busqué información sobre cómo se abría un blog. Primero abrí una cuenta en Wordpress, y cuando me di cuenta de que casi todos los blogs que leía entonces estaban en blogger, cerré esa cuenta y volví a abrir otro blog en blogger. Durante meses me costaba a mí mismo encontrar mi blog. Desde la ciudad sin cines se podía haber llamado también Sonámbulo en la ciudad dormitorio, fue otro de los nombres que barajé para él.
Escribir las entradas del blog me lleva unas dos horas/tres a la semana. En realidad no es mucho tiempo. Reflexionar sobre lo leído hace que la lectura sea más intenta, me hace aprender más sobre cómo lo hacen otros, lo que es una información valiosa para el momento en el que yo quiero sentarme a escribir. Así que desde un punto de vista puramente utilitario el blog funciona para mí en ese sentido.
Aunque lo realmente importante ha sido la de personas vinculadas al mundo del libro - lectores, escritores, editores o incluso periodistas culturales- que me ha permito conocer; a algunos de forma virtual, a través de internet, y a otros en persona. He intercambiado libros con lectores, autores o editores; me han mandado libros desde Chile, por ejemplo; o fotos: las de la casa natal de Jorge Teillier o el árbol carolino del que escribió Haroldo Conti. He hablado por teléfono con lectores gallegos que organizan lecturas conjuntas de novelas; o he conocido a escritores de los que ahora soy amigo y con los que puedo quedar a tomar algo y a hablar de libros. Me ha escrito un seguidor japonés del blog para decirme que leyó mi novela Acantilados de Howth. Alguien me dijo que se leyó todas las reseñas del blog; a alguien le descubrí a un autor (igual que más de un comentarista me descubrió a mí otro).
Así que desde luego para mí la experiencia de estos cuatro años de blog, de estas dos horas a la semana que dedico a escribir las reseñas, ha sido muy gratificante. Con ganas de seguir leyendo libros y de seguir comentándolos.
Voy a dejar aquí un enlace a la primera reseña del blog, por si alguien le apetece leerla:
El lamento de Portnoy, por PhilipRoth.