En esta entrada nombraré los cuatro tipos de comisiones más comunes que tu banco está aplicándote, y cómo evitarlas para un mejor aprovechamiento de tus finanzas personales:
1.- Reclamación de posiciones deudoras: Cuando entras en la temida “zona de reserva” de tu cuenta bancaria, es decir, estás en negativo, ó números rojos, tu banco te cobará un pequeño interés por la cantidad que ha quedado en “descubierto”, estamos hablando de unos pocos euros, ahora bien, la gula de algunas entidades no tiene escrúpulos y te cobrarán adicionalmente una “comisión por reclamación de posiciones deudoras”, es decir, les pagas una cifra que puede oscilar entre 12 y 35 € aproximadamente por reclamarte, el pago de lo adeudado.
Desde mi punto de vista ésta es una penalización doble pues ya te han cobrado una comisión en concepto de interés por el descubierto provocado, no necesitas que te cobren por avisarte de que estás en descubierto, eso ya lo sabes tú! y seguramente te hayas informado incluso antes de que el banco te lo haya notificado (si es que lo ha hecho) es común que te cobren por la reclamación sin habértela notificado.
Si el banco no te ha reclamado nada, no tiene derecho a cobrarte por este servicio, es totalmente ilegal cobrar por un servicio que no te ofrecen, no es necesario memorizar los artículos legislativos para saberlo, ve a tu oficina bancaria (o si lo prefieres llámales por teléfono) y pídeles que te reembolsen lo cobrado, así de simple. En caso de que afirmen haberte enviado alguna notificación déjales claro que no es así ¿Acaso te han enviado una carta certificada? Una simple carta (que pudo haberse extraviado) no es una reclamación fehaciente.
2.- Comisiones por mantenimiento de una cuenta donde tienes un préstamo: Ningún banco te puede obligar a tener una cuenta bancaria contratada con ellos por lo que si tienes una cuenta abierta para atender un crédito de esa entidad llámales cada vez que te carguen las comisiones por mantenimiento, ellos saben que es ilegal y te lo retrocederán. En caso de negativa han de facilitarte otro medio de pago como pueda ser domicializar el pago en una cuenta de otra entidad, pago por ventanilla, etc. y que así puedas cancelar la cuenta.
3.- Seguros vinculados a la hipoteca: Si tienes una hipoteca es muy probable que tu banco te haya obligado a contratar varios seguros (vida, hogar, etc.) Por ley, el único seguro que puede llegar a ser obligatorio al contratar una hipoteca es el de hogar con las coberturas de incendios. Cancelar un seguro es muy sencillo: simplemente deja de pagar la cuota y verás qué rápido te lo cancelan, ahora bien, revisa la letra pequeña de la hipoteca que has contratado pues podría ser que el tipo de interés sea diferente en caso de no tener un seguro de vida, eso sí, podrías contratarlo libremente con la compañía de seguros que mejor te convenga, no con la impuesta por tu banco.
4.- Cláusulas suelo: Las famosas clausulas suelo, se refieren a que si bien el interés que pagas por la cuota de tu hipoteca es variable, ligado a la fluctuación del euribor, en ocasiones los bancos fijan un mínimo del que no bajarían, es de dominio público que esta es una práctica abusiva como se ha reconocido en numerosos juzgados, y existen muchos despachos de abogados especializados en la eliminación de este tipo de cláusulas.
Por último te recomiendo que no trabajes con un único banco, y que elijas bancos que no cobren comisiones como ING, openbank, Cuenta Expansión de banco Sabadell, Triodos Bank, etc. Es absurdo pagar comisiones a un banco habiendo tantas alternativas, incluso hay bancos que pretenden cobrar por cada apunte que realizan.