… pero parafraseando al gran Groucho Marx si no te sirven por favor propón otros…
Tengo algunas ideas, muchas ganas, algo de experiencia, una pasión, busco una salida laboral, quiero hacer todo lo posible por vivir de lo que me gusta, una agenda potente, amigos con los que emprender, algún ahorro… En fin, creo que la mayor parte de los potenciales emprendedores se hacen estas preguntas y viven estas inquietudes.
Como dice mi amiga María, si tienes una idea lo demás no debería ser impedimento. Hoy voy a contar lo que pueda de un proceso que llevamos haciendo desde hace tiempo con amigos y socios en nuestro taller porque también nos estamos haciendo preguntas, siguiendo inquietudes y pensando la manera de capitalizar experiencia.
Trabajamos sobre dos ejes en los que dibujamos con tiza de colores las diferentes opciones. El caso es concreto y gira entorno a crear un negocio de venta de vino y servicios. Lo primero que pensamos fue en desarrollar un proyecto totalmente online. Y la investigación comenzó:
1) Venta online con tiendas partners asociadas: la inversión es baja pero el control del negocio no está en tus manos. Es más creemos que el negocio no es vender vino. Todavía no sabemos a ciencia cierta de qué va ese negocio. Probablemente gire entorno a venta de publicidad, “reventar” precios, coger lotes muy baratos del vino que compras en el súper, crear una base de datos muy potente que a la postre sea lo que “valorice” el negocio. En este modelo sobran intermediarios. Descartado: el enfoque resulta más bien especulativo y de cara a la velocidad que marca el mercado financiero (nos gusta dormir y reposar). Como ejemplos están la mayor parte de tiendas de vino online que conocemos. Para más info, buscar online por el criterio venta de vino online o tiendas de vino online.
Necesitas: la arquitectura y el diseño de la tienda y detectar tus potenciales partners. Tu movida será la promoción y el agite. Otro se responsabiliza del servicio. Pero cuidado porque tu cliente final asociará la calidad de ese servicio a tu empresa…
2) Tienda exclusiva online con venta propia: un coñazo. No lo digo yo solamente. Es parte de la conversación con emprendedores con gran experiencia en la materia. Aquí sales del modelo especultaivo. Se trata de invertir una cantidad de dinero que nunca es baja en generar stock, por mínimo que sea, y alquilar un almacén (puedes tener espacio en casa y te alivia un poquito el gasto fijo).
Entonces te enfrentas al desafío total: trasladar vino de un punto de la geografía a otro, o dicho de otro modo el factor transporte.
Mover vino es caro y seguirá siéndolo por mucho tiempo. Y está la canasta: tu cliente tiene que poder comprar seis botellas diferentes y no una caja de seis botellas del mismo vino.
En este modelo, sin embargo, puedes trabajar con la cantidad mínima sostenible de intermediarios y queda un poquito más claro que el negocio si sería la venta de vino.
Necesitas: la arquitectura y el diseño de la tienda, crear el stock, tener un almacén. A partir de aquí se trata de calibrar cuánto tienes que vender para que tu contabilidad sea sostenible. Y cómo lo harás…
3) Mix on-offline: Un startup exclusivo online implica un esfuerzo en recursos que si se tienen bien, pero lo más probable es que no. Y la cosa se vuelve una pelota de nieve. Entonces paras la pelota antes que te arrolle, levantas la cabeza a ver en dónde estás parado en la cancha y decides tu próxima jugada.
El ejercicio de la tienda online está hecho. Tienes web, stock y almacén. ¿Y si haces un pequeño esfuerzo y conviertes este almacén en una tienda de venta al público? ¡Genial! Has hecho un proceso siglo XXI. Comienzas en la Red y poco a poco vas buscando apoyos fuera.
¿Cuáles son las ventajas de tener la tienda física?
Aumentas tu exposición al público, cuentas con un espacio desde donde realizar actividades de promoción, le sacas más partido a tu “almacén” y potencias desde allí tu tienda online. Ahora resolviste la canasta con seis botellas diferentes, siempre y cuando tu cliente esté dispuesto a pagar por ello.
Necesitas: un local bien ubicado con alquiler asumible, invertir en un stock que puede ser el mismo que en el caso 2, crear una web que sea tu medio de comunicación y tu herramienta de venta, necesitas montar un tienda online.
Sacando punta al lápiz, si cuentas con recursos propios o tienes capacidad de crédito, esta es una buena opción. A mi me encanta. Y puedes buscar fórmulas sostenibles de empresa, por ejemplo, puedes crear una cooperativa.
Un ejemplo de este modelo es La Cave du Trinquetaille. Y su secreto es Romain. Una vez que traspasas las puertas de su tienda en Arles caes a sus pies porque él se arroja a los tuyos primero…
4) Acciones offline sin estructura física: coges tus contactos en el mundo del vino y les dices que te gustaría promover la cultura del vino por doquier. Comenzar por donde vives es una buena idea, práctica sobre todo. Tienes algunas botellas y organizas acciones temáticas por ejemplo: por regiones, por rarezas, por copa, por la tarde, por la mañana, en un bar, en un restaurante o en la sala de tu casa.
Cuando intentas aterrizar esta idea, inmediatamente te mueves de cuadrante:)
Sola puede quedar colgada del pincel, sin embargo como complemento de otras opciones, es excelente.
Necesitas contactos, identificar sitios con encanto, a lo sumo un blog desde donde hablar y agitar, controlar el funcionamiento y la dinámica de las redes sociales como por ejemplo Facebook.
En todos los casos es imprescindible conocer el producto que vendes y a quién crees que se lo vas a vender. A partir de aquí tomarás tus decisiones.
Estas son cuatro de infinitas posibilidades de negocio. Las dejamos sobre la mesa y además esperamos propuestas y comentarios. Ya sabemos que hay unos cuantos de uds. que están pensando en crear su propio negocio. ¿Han pasado por aquí? Sería notable seguir compartiendo esta información y enriquecedor y sobre todo iría muy en sintonía y sensibilidad de lo que queremos ser, emprendedores artesanos viables, sostenibles, realizados y felices. Porque esto no es sólo necesario es posible.
Salut!
Fuente: Observatorio de vino
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