A veces no hace falta ser un experto cocinero para sorprender. Con un poco de ingenio y la habilidad para elegir una receta fácil, pero efectiva podéis dejar boquiabiertos a vuestros invitados o disfrutar vosotros mismos de un banquete digno de días de fiesta. Hoy os traemos cuatro ideas sencillas, cuyo resultado es más que digno.
Helado de fresa
Hacer helado puede parecer muy complicado, pero no lo es. Ahora, que el calor de mayo empieza a apretar, los antojos de algo frío se asoman. Para refrescaros os proponemos esta receta de helado de fresa, ya que estamos en plena temporada de esta fruta. Los pasos son claros. Hay que batir unos huevos junto al azúcar, cortar las fresas en trozos pequeños junto a los demás ingredientes y echar la mezcla a la máquina para hacer helados. Después, sólo tendréis que sentaros a esperar a que la máquina haga su trabajo, mientras os relajáis.
Chuletas de cerdo Tonkatsu
El propio nombre impresiona, pero no es más que un filete de cerdo empanado. Eso sí, el sabor es especial gracias al tipo de rebozado que lleva panko. Además, lo podéis servir junto a una salsa de acompañamiento, la salsa tonkatsu, que podéis comprar ya hecha.
Mezcla de especias baharat
Podéis servir unas chuletas de cordero o unas pechugas a las que hayáis añadido esta gustosa mezcla de especias árabe, que se usa en el norte de África. Mezclar en un molinillo de café cardamomo, nuez moscada, canela, clavo, cilantro, comino, pimentón y pimienta. Un plato diferente.
Bizcocho de toda la vida
Cuesta poco prepararlo y es el ejemplo por anotonomasia de cocina casera y familiar. Seguro que alguien comenta que su abuela o tía lo hacía. Conseguiréis un viaje al pasado con cada mordisco. Hay que mezclar los ingredientes, respetando todas las medidas y después dejar que se haga solo en el horno. Si os gusta más tostado tendréis que dejarlo más tiempo. Podéis servirlo junto a unas porciones de chocolate.
¿Cuál es vuestra receta más sorprendente y sencilla?