El atentado a la tienda El Encanto, una de las tantas acciones terroristas del imperialismo en aras de derrocar la revolución cubana. Una actividad pagada y ejecutada por mercenarios vendepatria como los de San Isidro, aquellos que se dicen artistas, que se dicen cantantes y lo que se llenan los bolsillos de dinero pagado para la subversión: en disímiles modos de agredir al gobierno cubano. Míremos las redes sociales, las noticias cotidianas, de hoy, el ahora pero no olvidemos la historia. Días como este de 1961, son los que no pueden volver. #TerrorismoNuncaMas #TenemosMemoria