Ante el reciente brote de Ébola en África Occidental —el más fatal de la historia desde que se descubrió esta enfermedad en 1976; y que se ha expandido rápidamente— mantener y reforzar la vigilancia en las fronteras cubanas para evitar la introducción de esta y otras enfermedades es una prioridad para las autoridades sanitarias.
Así señaló a Granma Niurka Molina Águila, jefa del Departamento de Control Sanitario Internacional del Ministerio de Salud Pública. “Si bien Cuba no tiene vuelos directos con los países donde se ha documentado la transmisión del virus, su introducción puede darse a través de viajeros internacionales, preferentemente por vía aérea”.
“De ahí que se estreche la vigilancia para todas las personas procedentes de África y otros continentes de riesgo como América del Sur, América Central, y el Sudeste Asiático; y fundamentalmente para aquellos ciudadanos de los países que han reportado casos de Ébola; como Nigeria, Liberia, Guinea Conakry, Sierra Leona y recientemente República Democrática del Congo”, explicó la especialista.
Respecto a las medidas de control, la entrevistada indicó que los pasajeros procedentes de estos países, aun cuando no presenten ningún signo de alarma, están siendo sometidos a vigilancia epidemiológica por un periodo de 21 días en el Instituto de Medicina Tropical Pedro Kourí (IPK).
“De verificarse con las autoridades de inmigración que estos ciudadanos no han estado con un mes de anterioridad en sus países de origen, entonces entran a Cuba de forma natural”, precisó.
Asimismo, Molina Águila explicó que se mantienen las líneas de control sanitario establecidas para todas las personas que arriben al país, como la declaración general de sanidad de la nave en un primer momento, y la declaración de sanidad del viajero.
De detectarse una persona con sospechas de Ébola durante esta primera línea de seguridad, o mediante la vigilancia de temperatura, esta se envía inmediatamente al IPK o a los hospitales designados en cada provincia.
Igualmente —dijo— se mantiene con posterioridad una comunicación constante con los lugares donde van a estar estas personas como son las escuelas latinoamericanas, hoteles o casas de alojamiento.
“Mantenemos contacto diario con cada uno de los aeropuertos del país, todos con salas de aislamiento y donde los trabajadores tienen pleno conocimiento de qué medidas tomar ante un posible caso de la enfermedad. Cuentan además con un equipo básico de salud y los medios de protección necesarios para enfrentar una persona con pa¬tología similar al Ébola”, refirió la jefa del Departa¬mento de Control Sanitario Internacional.
“Para nosotros es imprescindible la vigilancia con estrecho rigor en todas las fronteras, incluidos los puertos. Estamos preparados y trabajando conjuntamente con el resto de los organismos como los Ministerios de Relaciones Exteriores, Comercio Exterior, Turismo y Educación”.
La entrevistada subrayó que las autoridades de salud mantienen estrecho contacto con los colaboradores cubanos presentes en Sierra Leona y Guinea Conakry, dos de las naciones afectadas por la epidemia; y ratificó que hasta la fecha ninguno de ellos ha tenido contacto con algún paciente sospechoso de Ébola.
Asimismo se refuerzan las medidas de seguridad y prevención, por lo que se les ha dotado de los medios de protección necesarios; aun cuando se mantienen trabajando alejados del brote.
Fuente: Granma/CubaSí