Cucaracha

Por Papacangrejo @Papicangrejo

Este año los regalos que han llegado han sido de lo más variado. Como siempre cangrejito no quiso hacer carta porque si no pide es más sorpresa todavía, y cangrejín, pues el todavía no está por pedir mucho.
Aunque entre todos los regalos creo que voy a destacar el juego de La cucaracha de la casa alemana Ravensburger. Del resto de regalos os iré hablando en otras entradas.

El juego lo conocimos por anuncios en televisión, porque cangrejín se volvía un poco más loco cuando aparecía este juego en la pantalla. Como a todos nos parecía divertido pensamos que estaría bien que llegara este regalo.

El juego consiste en atrapar una cucaracha que hay en la cocina (el tablero). En el tablero hay una serie de cucharas, tenedores y cuchillos que puedes mover en tu turno, según lo que te salga al tirar el dado. El objetivo es lograr que la cucaracha caiga en tu trampa. Gana el primero que la atrape cinco veces.

En el juego pone que es a partir de cinco años, pero con cangrejin jugamos sin problema, sólo tenemos que evitar que se vuelva loco moviendo las piezas y respete los turnos, no es tan difícil.

La cucaracha en si me encanta, se mueve nerviosa por el tablero gracias a la vibración, y sus movimientos son inesperados, siempre va hacia donde le da la gana. Se han dado casos de abrir camino hacia una trampa, esquivarla y dar toda la vuelta al tablero para meterse en otra.

Para ir bien hay que ser rápido, no encandilarte viendo corretear a la cucaracha por el tablero, y tirar rápidamente en cuanto el jugador que te precede realice su movimiento, porque si eres rápido puedes evitar que tu contrincante capture la cucaracha con un movimiento estratégico sin que les de tiempo a reaccionar. No es fácil, el traqueteo del bicho es hipnótico.

Un buen rato de risas aseguradas.