Cuéllar (Segovia)

Por Yorga @javieramosantos

Uno de los castillos más espectaculares de la geografía hispana es el de Coca, ciudad que vio nacer al último emperador que unificó Roma en un solo Imperio, el hispano Teodosio, conocido como el Grande. Desde aquí, una carretera secundaria permite al viajero alcanzar Cuéllar, un pueblo enclavado sobre una colina por cuyas laderas se desparraman las casas, y cuyos orígenes se pierden en la noche de los tiempos. Si el viajero se adentra en su historia, descubre uno de los lugares con más historia de Castilla y León.

Algunos historiadores identifican Cuéllar con la Gella de Tolomeo, otros con la Acontia de Estrabón y, un tercer grupo, con Calenda, ciudad tomada por el cónsul romano Tito Didio en el año 96. Durante el reinado de los visigodos recibió el nombre de Colar, de donde deriva Cuéllar. Parece ser que en el año 997 la villa fue saqueada por el caudillo musulmán Almanzor, que hizo prisioneros a sus habitantes trasladándolos a Andalucía. Fue a finales del siglo XI cuando Cuéllar resultó reconquistada y repoblada por Alfonso VI.

En el siglo XII estaba constituida en consejo y el rey Alfonso X el Sabio le otorgó fueros y leyes especiales (1256) celebrando cortes en ella un año después. En 1430 Juan II donó la villa a don Fadrique, el conde Luna. En 1439 pasó a manos del Reino de Navarra y en 1464, Enrique IV donó Cuéllar a a Beltrán de la Cueva, primer duque de Alburquerque, bajo cuya tutela permaneció tres siglos hasta quedar en posesión de la casa de Alcañices.

Vista de Cuéllar desde su castillo./BigSus

La historia de esta localidad segoviana no sería la misma, además de todo lo dicho, sin la eminente figura de Diego Velázquez de Cuéllar, un conquistador español que se convirtió en el primer gobernador de Cuba, cargo que ocupó desde 1511 hasta su muerte en 1524. Nacido en Cuéllar, a este alto dignatario español se le debe la fundación de las siete primeras ciudades españolas de Cuba, isla en la que desembarcó Colón con sus carabelas el 28 de octubre de 1492, las tres primeras naves europeas que arribaban al Nuevo Mundo.

Desde aquel entonces, el vínculo que se ha establecido entre España y Cuba ha sido muy estrecho. La isla más extensa del Mar Caribe es ahora un destino vacacional de primer nivel. Muchos son los turistas españoles que visitan cada año este país y disfrutan de los atractivos que ofrece: excelentes playas, rico patrimonio cultural e histórico, hospitalidad de sus gentes… Los viajes a Cuba son una buena opción para el viajero que, aparte de su afición por la historia, que Cuba la tiene y mucha, descubra las peculiaridades de una región única en el mundo.

El castillo de Cuéllar./Romerin

Sin duda, uno de los principales reclamos turísticos y sobre todo históricos que tiene Cuéllar es su castillo (siglo XV), situado en un alto cerro con planta cuadrilonga con sendos cubos en sus ángulos. El cubo del noroeste forma en el interior un salón abovedado decorado por una ventana gótica. Al sudoeste se alza una torre cuadrada. Entre ambos se observa un lienzo de la muralla donde se abre la puerta de entrada formada por un arco arábigo defendido por dos garitas. Construido por Enrique IV, figura entre los mejores ejemplos castellanos de castillo-palacio.

La fortaleza fue utilizada como prisión y en ella estuvo cautivo el escritor José de Espronceda, aquel de La canción del pirata, por la lectura de unos versos considerados subversivos. Se levanta en la parte más alta de la villa, como corresponde a la función defensiva que desempeñaba. Está rodeada por unas robustas y trabajadas columnas que la dotan de un carácter especial.

Santuario del Henar./Rastrojo

Entre los edificios religiosos de Cuéllar destacan la iglesia de San Esteban, con dos sepulcros góticos-mudéjares decorados con yeserías y bultos de alabastro; la iglesia de San Martín, frente al castillo; la iglesia de San Andrés, con una portada románica de arquivoltas de piedra; la iglesia de San Miguel, en la Plaza Mayor, en cuyo interior se contempla una Virgen de Rosario, un calvario del siglo XVII y un lienzo de Lucas Jordán; la iglesia del convento de Santa Clara. Mientras, el Hospital de la Magdalena destaca por su portada gótica. Entre los conventos que albergó la villa destacaba el de San Francisco (siglo XIII) convertido en panteón familiar de los duques de Alburquerque.

En los alrededores, a escasos cinco kilómetros se encuentra el santuario de Nuestra Señora del Henar (siglo XVIII), construido en el lugar que, según la tradición, se apareció la Virgen a un pastor. En el interior, el viajero puede contemplar pinturas al fresco de José Micot y el camarín barroco con la imagen de la Virgen.

Cuéllar no es la única localidad con reminiscencias exploradoras en América. Lugares con historia como Medellín (Badajoz), que vio nacer a Hernán Cortés, o Castilleja de la Cuesta (Sevilla), donde feneció, son dos buenas alternativas para completar la ruta de los conquistadores por nuestra geografía. Como lo es también Trujillo, patria chica de Francisco Pizarro y Francisco de Orellana. Y el viajero no puede olvidarse de Jerez de los Caballeros, donde vino a la vida Vasco Núñez de Balboa.

Dónde dormir: Restaurante Hotel Florida; Crta. A-601. Salida 57; Cuéllar (Segovia); teléfonos: 921140368 y 921140275. info@restaurantehotelflorida.es

Dónde comer: Restaurante La Brasería de Cuéllar; C/ Agustín Daza nº 8; 40200 Cuéllar (Segovia); teléfono: 921144926.