Cuida tu Piel

Por Nell

Cuida tu Piel

Tradicionalmente, el único objetivo del maquillaje ha sido obtener un buen resultado, sin tener en cuenta los efectos nocivos que se pudiera causar a la piel, a corto o largo plazo.

Hoy, sin embargo, las formulas tienden a ser más respetuosas con la salud cutánea y las firmas de cosmética natural ofrecen productos con ingredientes naturales de primera calidad; extractos de plantas medicinales para el cuidado de la piel, a menudo de cultivo biológico; aceites y ceras vegetales; pigmentos minerales micronizados; vitaminas… La idea es que el producto no sólo no perjudique, sino que además hidrate, proteja y nutra la piel.

Es importante conocer lo que contienen los productos cosméticos que empleamos porque la piel está constantemente asimilando sustancias a través de sus poros. Algunas pueden resultar agresivas para la piel y causar alergias, irritación, deshidratación o envejecimiento prematuro. Se sospecha, además que determinados componentes químicos pueden resultar perjudiciales para la salud a largo plazo, puesto que se absorben y pasan al torrente sanguíneo.

Lo mejor para la piel

Los productos más afines a la piel son los formulados con componentes naturales, que estimulan la función regeneradora de la piel. No llevan colorantes, conservantes ni fragancias de síntesis, parafinas u otros productos derivados del petróleo. Pero ¡cuidado!, hay cosméticos que utilizan algún ingrediente natural como reclamo pero que contienen multitud de otras sustancias que no lo son.

Los nuevos productos vegetales

Las bases de maquillaje dan luz al cutis, atenúan las irregularidades de la piel y disimulan las líneas de expresión. Las fórmulas naturales incluyen en su composición aceites que nutren la piel, partículas de arcilla natural que reducen los brillos y pigmentos reflectantes. Pueden incorporar también vitaminas de la piel, ácido hialurónico para proteger  la deshidratación e ingredientes tan variados como aceite de macademía, seda, aceite de jojoba, ceras de caléndula y carnauba, polifenoles de pepita de uva, que hidratan y nutren en profundidad.

Los lápices correctores, que cubren las ojeras, enrojecimientos, manchas o pequeñas cicatrices, pueden estar compuestos por lecitina, aceite de aguacate, aceite de nuez, de jojoba y manteca de karité, que hidratan la piel. Plantas medicinales como la zanahoria, la manzanilla y la caléndula actúan calmando las pieles irritadas.

Para acentuar las mejillas, los coloretes se valen de seda, pétalos de rosas y aceite de jojoba, que iluminan la piel.

Las barras de labios, además de colorear, ahora también nutren e hidratan con ingredientes como los aceites vegetales y las ceras naturales. Además, refuerzan y reestructuran la barrera cutánea y le dan elasticidad. La rosa canina, el aceite de almendras, el aceite de hueso de albaricoque, la manteca de mango o el aceite de frutos de endrino consiguen texturas aterciopeladas.

La cosmética natural ofrece sombras de ojos a base de pigmentos naturales, pétalos de rosa y seda, que cuidan la piel más sensible del rostro en vez de resecar el párpado y acentuar las arrugas. Los lápices de ojos y eyeliners incluyen aloe, extractos de eufrasia, té negro y hojas de neem de efecto calmante.

Las máscaras de pestañas, además de “alargarlas”, las fortalecen y nutren con cera de rosas y aceite de jojoba, que envuelven cada una de las pestañas.