La ardua tarea diaria del orfanato Australian Bat Clinic, fundado por Trish Wimberley es la recuperación de murciélagos heridos, su acogida y la concienciación de las personas para perderle el miedo a estos animales tan repudiados. Culpa de la mala fama de estas “ratas voladoras” como comúnmente se las llama es por su asociación a los vampiros en el cine.
El orfanato de Trish se hace cargo de estos animales heridos y los cuidan hasta que son capaces de reinsertarlos en su hábitat natural. También organizan jornadas de suelta de murciélagos, donde enseñan a las personas cómo es esta especie y en el caso de los australianos, lo buena que es para mantener su ecosistema.
Es difícil mantener un orfanato así, pero Trish se lo ha propuesto y lo hace cada día, sólo ayudada por varios voluntarios. Una difícil tarea que le consume casi todas las horas del día y deja poco para el descanso de esta “mamá murciélago” australiana.