Cultura pistolera

Por Antoniobarba

La horrenda tragedia de Connecticut, con un chalado que entró en un colegio de Newport y se llevó por delante la vida de más de veinte personas, muchas de ellas niños y niñas de corta edad, vuelve a disparar el debate sobre el fácil acceso a las armas en Estados Unidos. Ojalá el presidente Obama haga algo por contener semejante barbaridad, la consecuencia extrema del culto a la pistola que está en el origen de esta nación, denunciado por Michael Moore en el documental (de hace ya unos años) Bowling for Columbine. Pero parece complicado en un lugar en el que puede comprar uno un fusil de asalto casi que en cualquier parte, y en el que en muchas casas hay verdaderos arsenales. Mi hermano pequeño, que vive allí, me manda un periódico reciente, cuya foto adjunto, con anuncios de anuncios de fusiles automáticos (desde 300 euros, una bagatela), al igual que los periódicos de este lado del charco traen perfumes a estas alturas del año: algo de lo más normal del mundo. A nosotros nos choca, pero mucha gente de allí lo ve como si tal cosa, con poderosos grupos de presión a favor de seguir defendiendo esta cultura pistolera. Obama parece estar dando algunos pasos para ir conteniendo esta locura; ojalá llegue a buen puerto y la tragedia de Newport alumbre, al menos, un tiempo nuevo.

Las tiras cómicas en un periódico de USA, y al lado los anuncios de armas. Normal, ¿no?