Mi cumpleaño preferido fue cuando cumplí quince años. Una fiesta inolvidable, muy tradicional según nuestras costumbres latinas: con damas, chambelanes, maestro de ceremonia, un vals, y por supuesto un bizcocho hermoso, y bien delicioso . Creo que si una quinceañara de hoy en día lee esto pensaría que aburrido!!!. Sería muy diferente a como una quinceañera celebraría sus quince hoy en día. Sin embargo, aunque la fiesta fue muy agradable, y estuvo bastante amena toda la noche. Lo que más disfruté fuerón los ensayos de baile. Después de ensayar la coreografía del vals nos íbamos a disfrutar el resto de la tarde todos juntos, desde el maestro de baile, las damas, los chambelanes y por su puesto yo. Es un recuerdo que me provoca una sonrisa que siempre lo llevaré con migo.
Pero, esa sonrisa desapareció de mis labios sin darme cuenta; cuando un primo llamadó Isaa, al cumplir los 24 años por tercera vez me sacó de mi error. Una tarde el empezó a sacar cuentas y me dijó; " tú no puedes tener 24 años cuando mi hermana, Noelia, tiene 26 y en seis meses cumple 27". Tu tienes 27 años, ya que a Noelia tu le llevas 6 meses. En ese momento no me estaba riendo al ver la realidad de cuanto años tenía, y por lo ocupada que estaba con mis asuntos, no me había dado cuenta que tres años me habían pasado.
Bueno cuando cumplí los 30 años decidí que no cumpliría un año más. Tomé la decisión que cada cumpleaños que celebrará les pondría unas velitas de 15 años. Que cosa que la juventud de hoy en día quisierán que los años les pasarán pronto para ser independiente. Cuando la mayoría de las mujeres pagamos una pequeña fortuna en cremas rejuvenecedoras, para mantenernos jóvenes. De verdad que es lindo ser jóven y ingenuo; es lo más lindo de concidero que un niño de cualquier edad tiene.
La madre de Naomi una bebita de cuatro años me conctató por medio de unas de mis clientas para que le hiciera el bizcocho a Naomi para celebrar su 4 cumpleaños. Sin embargo, me dijo que había mandado a ser la pieza de harriba del bizcocho.
Lo que se me ocurrió fue hacerle una plancha falsa de bizcocho para darle altura, y montarla en otra plancha mucho más grande para solucionar el problema.
Como tengo un pulso terrible use una cinta adhesiva de ventanas para cubrír las migajas del estereofón; y cubrí el borde de la plancha de abajo. Luego la cubrí con la cinta de decorar.
Feliz cumpleaños Naomi