✨Cúmulo galáctico Antila por Rolf Olsen

Por Juan Carlos
Viernes 2 de Diciembre de 2016

El cúmulo galáctico Antlia, también llamado Abell S0636, es un grupo compacto de galaxias ubicadas en el sur de la constelación Antlia (la bomba de aire). Forma parte del gran supercúmulo Hydra-Centaurus y se encuentra a unos 133 millones de años luz de distancia, lo que hace que sea posiblemente el tercer cúmulo de galaxias más cercano a nuestro Grupo Local, después de los cúmulos de Virgo y Fornax. El cúmulo contiene alrededor de 234 galaxias y es inusual, ya que no tiene un miembro más brillante que otros. En cambio sus galaxias se dividen en dos subgrupos, con el Norte (parte central izquierda) un subgrupo se concentra alrededor de la galaxia elíptica gigante NGC 3268 y el del Sur (parte superior derecha) gira alrededor del otro subgrupo que contiene la galaxia gigante elíptica NGC 3258. El cúmulo es muy compacto en comparación con otros cúmulos similares, y contiene un gran número de galaxias elípticas jóvenes y lenticulares, incluyendo varias inusuales elípticas enanas compactas. Esta imagen ultra profunda revela que muchas de estas galaxias están interactuando gravitacionalmente hasta cierto punto; las débiles colas de marea y halos distorsionados son comunes en todo el campo de visión. De hecho, la única gran galaxia, que presenta una estructura en espiral clásica sin perturbaciones es PGC31094 que se situa muy cerca del borde inferior.

Un gran número de pequeñas galaxias de fondo son visibles en todas partes de la imagen. Muchas de ellas aparecen agrupadas en sus propios cúmulos distantes, mucho más allá de los reinos del propio Cúmulo Antlia. A esta profundidad extrema estructuras a gran escala débiles y las características peculiares se revelan a través de todo el campo de visión. Encontramos extensos halos de galaxias elípticas gigantes, Luz interior, Remanentes de supernova y una micronube de polvo superpuesta a NGC 3269. Los grandes y extensos halos de las elípticas gigantes NGC 3268 y NGC 3258 son muy prominentes, cada uno llena una gran parte en torno a sus respectivos núcleos con una neblina suave procedente de la luz combinada de cientos de miles de millones de estrellas individuales. También se pueden ver halos en torno a muchas de las otras galaxias. Varios de éstos halos muestran evidencia de estructuras laminares que son un indicador de fusiones o pasadas, de interacciones entre galaxias.

La luz interior es el débil resplandor de las estrellas no unidas gravitacionalmente a una galaxia en particular, pero todavía unidos a la agrupación en su conjunto. Esta luz es increíblemente débil y difícil de detectar porque su brillo suele estar muy por debajo de 1% del fondo del cosmos. Con el tiempo la interacción gravitacional entre los miembros del cúmulo tienden a despojar a las estrellas individuales de las regiones exteriores de sus galaxias anfitrionas. La estructura de esta luz puede proporcionar pistas importantes sobre la dinámica de la agrupación y su historia. Pero el grupo de galaxias NGC 3258 tiene claramente un brillo difuso de emisión que se extiende hacia abajo a la izquierda y a la derecha del grupo de mayor masa NGC3268. Ambos grupos también parecen algo conectados por un puente de material que posiblemente también llega más abajo para incluir la delicada espiral NGC 3269.

Delicados filamentos rojos remanentes de supernova de Antlia, se superponen en el espacio entre los dos subgrupos, lo que complica la distinción entre las fuentes de luz difusa en esta área. Visible en esta imagen hay un delgado velo de filamentos tenues; estructuras fantasmales que ahora se conocen como los cirros galácticos, o integrado nebulosa Flux (IFN). Sólo hace algunas décadas este tipo de estructuras se eliminaron a menudo en el procesamiento de imágenes, ya que se pensaba que eran defectos de imagen. Sin embargo, estos parches ultra débiles de nebulosidad son reales y consisten en delgados restos de gas y polvo que no está iluminado directamente por las estrellas sino que simplemente reflejan el extremadamente débil brillo combinado de la Vía Láctea. Un débil tramo de nebulousidad rojizo parece extenderse hacia la derecha a través del borde izquierdo. Esto probablemente se asocie al recientemente descubierto remanente de supernova Antlia, que cubre 24° del cielo, centrado en la constelación Antlia. Esta antigüa estructura es apenas visible en las exposiciones Ha profundas y también emite de manera significativa en las radiografías. 

NGC3269 es una de las galaxias más interesantes de la imagen. Parece ser una espiral Sa rodeada por varios bucles de marea y grupos. Una característica particularmente curiosa es un minúsculo 4 segundos de arco que contiene una amplia nube de polvo marrón superpuesta en los brazos espirales azules brillantes. Incluso hay dos nubecillas más pequeñas de las cuales sólo una es visible en esta imagen. Se sospecha que son únicas pequeñas nubes de polvo en primer plano de un tipo hasta ahora desconocido. También es evidente a partir de la imagen que estamos viendo, a través de una compleja distribución del flujo integrado de la nebulosa, que en la práctica actúan como la contaminación lumínica en este contexto. Sin embargo, la presencia de estas nubes tenues que aparecen a través del campo de visión también es belleza inquietante, y es sin duda uno de los aspectos más destacados de la imagen.


La imagen se obtuvo de exposiciones de más de 55 noches diferentes durante el transcurso de 6 meses, desde enero hasta junio de 2015, con un total acumulado de 152 horas de datos. Rolf Olsen es sin duda un gran astrónomo que además de combinar y procesar imágenes, es capaz de reunir toda la información expuesta en éste artículo y transmitirla con fines educativos a todo el mundo. Aunque la traducción de todo el texto no ha sido nada fácil, Universo Mágico ofrece la interesante información a sus lectores, con el ánimo de difundir los últimos conocimientos astronómicos. Detalles técnicos

Fotografía OriginalCrédito:    Rolf Olsen