Hace un mes fue la feria de repostería en Coruña y en la entrada regalaban una botellita de crema de orujo a cada asistente que seguro dejaría a muchos encantados. A mi que queréis que os diga prefería que me dieran un cupcake, jeje, pero como a caballo regalado no le mires el diente, sino te la vas a beber, aprovéchala y hazte tu el cupcake.
En este caso quien más los disfrutó fue mi chico, yo me comí uno solo, en dos veces. No me gustaron mucho, no porque no supieran bien, sino porque me sabían demasiado a crema de orujo, y eso que le eché poca. A Juan le encantaron y si al igual que a él te gusta este licor, seguro que también te dejarán satisfecho.
INGREDIENTES:
Bizcocho: (8-9 unds)
- 60 gr. de aceite
- 130 gr. de azúcar
- 1/2 cucharadita de vainilla
- 1 huevo
- 15 gr. de cacao en polvo sin azúcar
- 125 ml. de buttermilk
- 115 gr. de harina
- 1/2 cucharadita de bicarbonato
- pizca de sal
- 1 cucharada de crema de orujo
- 75 gr. de clara de huevo
- 50 gr. de agua
- 150 gr. de azúcar
- 175 gr. de mantequilla
- 1/2 cucharadita de vainilla
- 2 cucharaditas de crema de orujo
PREPARACIÓN:
Para los bizcochos batimos el aceite con el azúcar. Añadimos el huevo y la vainilla y batimos. Incorporamos la harina tamizada con el cacao en polvo, el bicarbonato y la sal, en dos veces, intercalándola con el buttermilk. Mezclamos bien y añadimos la crema de orujo. Rellenamos las cápsulas 2/3 y con el horno precalentado a 180º horneamos unos 18-20 minutos. Dejamos enfriar.
Para la crema preparamos un almíbar con el agua y el azúcar, Ponemos un termómetro y cuando llegue a 110º montamos las claras a pico duro. Cuando el termómetro marque 117º añadimos el almíbar en hilo a las claras y seguimos montando hasta que enfríe. Le añadimos poco a poco la mantequilla blanda y batimos hasta tener una crema sedosa. Por último incorporamos lentamente la vainilla y la crema de orujo.
Rellenamos una manga pastelera con la boquilla escogida y decoramos los cupcakes.
Puedes aumentar la cantidad de crema de orujo a tu gusto, sin pasarte para que no pierda consistencia. Sobrará una poca que puedes congelar para utilizarla en otra ocasión. El próximo día os enseñaré el uso que le di yo. Seguro que sois muy listos y lo adivináis!
Hasta entonces!!!