Hay muchas ideas extrañas que han sido bastante exitosas económicamente. Algunas parecen simples extravagancias, otras verdaderas tonterías, pero estas simples ideas dieron ganancias millonarias a sus creadores. He aquí algunos ejemplos de proyectos empresariales, algunos tan extravagantes que nadie en su sano juicio se le ocurriría intentar llevar adelante.
The Pet Rock (La mascota roca). Gary Dahl estaba en un bar y escucho que las personas se quejaban de sus mascotas, de hasta que punto debían cuidar de ellas y centrar toda su atención. Entonces le llego una idea a la cabeza, crear la mascota perfecta, la llamo The pet rock. Presentó esta mascota como la mascota perfecta, que no necesita ser alimentada, regada, o sacar a caminar, y por supuesto, al ser una roca no necesitará de nada. El sr. Dahl compró una carga de varias piedras y rocas, las envaso y empaqueto para la venta cobrando algo de 4 dólares por pieza. Luego que su idea tomara forma lo que hizo fue comerciar las piedras como si fueran mascotas reales. Esta idea convirtió a Gary Dahl en un millonario
Million dollar homepage. La venta de píxeles en un sitio web es una idea ridícula, pero cuando se trata de Internet, las ideas ridículas siempre han sido la clave para conseguir cantidades de dinero. Para Alex Tew, vender píxeles en una página web tenía que ser simplemente algo que le ayudara a pagar la universidad. No se imaginaba que sería algo más que eso y que sería, de hecho, ayudar a conseguir una ventaja en la vida, y ahora el joven ya tiene más de un millón de dólares. Era la época anterior a la explosión de la burbuja de las punto com, allá en 2001. Enseguida le solicitaron para entrevistas en las cadenas de noticias más importantes y consiguió aun más publicidad, pronto, otras personas intentaron copiar su idea. Ahora, eso ridículo, es ridículo éxito.
Santa Mail (El correo de Papa Noel). Para los padres y con las nuevas tecnologías, cada año se hace más complicado convencer a los niños de que Santa Claus existe, ese hombre barrigudo que vive en el Polo Norte y cada navidad trae regalos a todos los niños del mundo. Aprovechando el espíritu de la Navidad, un grupo con una dirección postal registrada en el Polo Norte, Alaska, decidieron cobrar a los padres diez dólares para enviar a los niños una carta, haciéndose pasar ellos mismos por San Nicolás (Santa Claus). Esta idea de negocio les dio un retorno de dos millones de dólares, después de que más de 300.000 padres solicitaron que el falso equipo de Santa Claus en Alaska enviara sus cartas a los niños.
The antenna balls. Aunque ahora los nuevos coches no lleven esas aparatosas antenas de antes, hace unos años, un Californiano llamado Jason Wall, tuvo la idea de decorar esas antenas con globos y pelotas para hacer de los coches algo más vistoso y divertido. La idea no parece realmente muy buena, pero ahora este joven americano es millonario.