Curiosidades de la emblemática furgoneta Volkswagen T1

Publicado el 15 mayo 2018 por Rafael @merkabici

Curiosidades de la emblemática furgoneta Volkswagen T1

Volkswagen T1

En el año 1950, Volkswagen presenta la furgoneta Volkswagen T1, fabricada y diseñada bajo el mismo concepto de su primer coche, el escarabajo.

Esta furgoneta ha sobrevivido desde entonces, y actualmente ha llegado a su sexta generación.

Pero todo comenzó cuando Ben Pon, quien fue el primer importador de la compañía.

Se encontró un día con un transportador de piezas en una de las fábricas, el cual avanzaba con un motor de escarabajo.

Este era llamado el plattenwagen, pero no era apto para las vías públicas porque debía conducirse desde su parte posterior, y sentado encima del motor.

Ben Pon tuvo la visión y encontró en este la oportunidad de hacer dinero, con la gran demanda que existía en Europa por un coche como el que imaginaba.

Así fue como nació la furgoneta Volkswagen T1, que plasmada en un boceto, fue vista por primera vez.

Tenía formas redondeadas, el motor en la parte de atrás y la dirección en la parte de adelante; a partir de este boceto, volkswagen diseño 4 prototipos para ser presentados al público.

De estos prototipos, la T1 samba siempre fue la más buscada.

Era bicolor pero siempre se usaba el blanco como base, tenía 23 ventanas y con un particular techo solar, era la versión más lujosa.

Modelos de las Volkswagen T1

Volkswagen T1 samba.

Estas fueron creadas para durar, tanto que aun vemos a la primera generación de la furgoneta Volkswagen T1 rodando por las carreteras.

La más resistente de estas versiones era la T1 Westfalia.

T1 Westfalia

Para esta se contrató a la empresa Westfalia-Werke, con la intención de incorporar algunas modificaciones.

Algunos cambios como asientos plegables para dormir, fregaderos, cortinas, una mesa comedor y liberar espacio para almacenaje.

De estas se fabricaron tan solo mil, y su popularidad se debe a tanta exclusividad.

Se han vuelto el tesoro de los coleccionistas y por la alta calidad en su mecánica, la Westfalia aun sirve para su propósito original.

La furgoneta Volkswagen T1 heredó el motor del escarabajo, sin embargo estos, eran de apenas 1200 cm3 y 30 caballos de fuerza.

Esa potencia que no bastaba para avanzar en una pendiente mínima y con un poco de peso extra.

Como un plan de ahorro, en lugar de desarrollar una mecánica más potente y otra caja de cambios, volkswagen decide montar un engrane reductor en el buje de las ruedas traseras.

De esta manera cortaban el desarrollo y ganaban un poco de altura libre al suelo, ya que el eje ataca la rueda por encima del centro del buje.

Esta fue la solución para que la furgoneta Volkswagen T1 lograra avanzar con facilidad en una pendiente.

Después se podría mover fuera de la carretera como una especie de 4×4; eso sí, apenas alcanzaba los 80 kilómetros por hora en el asfalto.

Se incorporó un propulsor de 4 cilindros, era un bóxer refrigerado por aire.

Estos motores eran muy confiables en los climas más extremos, ya que no se les congelaba ni les hervía el circuito.

La T1 era capaz de circular en cualquier parte y bajo cualquier circunstancia.

Furgoneta barata

Este modelo solía ser la furgoneta barata de la época.  Era muy ahorrativa en cuanto al consumo de combustible.

Es por ello que la furgoneta Volkswagen T1, se hizo muy popular entre los jóvenes hippies, haciéndose un símbolo en ese ambiente.

Una de estas familias grupis que se convirtió en parte de la clientela, fue la tristemente famosa familia Manson.