¡¡Hola a todos!! Uy.... hoy estoy feliz como una perdíz, jejeje... aparte de matada por la fiesta de Almu de ayer (de la que os enseñaré fotos esta semana, no os preocupéis!!), cansada y en modo el aprendiz de brujo intentando descubrir el truco para que las escobas funcionen por sí solas mientras yo me quedo tirada en el sofá... jejeje...
Un reto súper chulo del que ya os hablé un poquito cuando os enseñé una receta típica búlgara, el tarator... esa sopa fresquita y suave de pepino que en estos días bebo como si fuera agua.
Sin embargo hoy os quiero contar más... el reto consiste en que cada mes y de forma rotativa, siguiendo el orden del abecedario, una de las anfitrionas del reto elige un país que empiece por la letra correspondiente... así si en abril tocó Azerbayán, en mayo preparamos recetas búlgaras... y este mes... la C, la C.... ¡¡Camboya!!
Dios sabrá en julio con la D que será... ya las estoy temiendo... así, así... sin mucho pensar se me ocurren Dinamarca, ¡¡¡y ya está!! En fin... eso será el mes que viene.
Este, como os estaba contando tenemos un país exótico, lejano y para mí bastante desconocido.... CAMBOYA.
Os tengo que confesar un secreto.... ejem... yo para estas cosas de viajes etc... no soy muy aventurera... por no decir nada en absoluto... me encanta viajar, no me entendáis mal... pero mi idea de un viaje se acerca más a cómodo, sin tener que vacunarme previamente, sin tener que viajar horas y horas y sin tener que pasar todo el viaje en botas de montaña, sudada y con miedo a que me pique un mosquito, coma algo que me siente fatal o no pueda lavarme el pelo.
Todo esto os lo cuento porque, ejem... no os puedo contar mucho sobre Camboya... porque no conozco casi nada... así que me he tenido que informar un poquito...
Os puedo contar que Camboya es un país oriental volcado en el golfo de Tailandia, siendo vecino de Laos, Vietnam, Tailandia y Malasia. Es un país frondoso, vegetal, con grandes bosques, inmensos ríos y playas paradisíacas...
La localización del país (en la ruta China-India) y sus vastos sistemas de irrigación lo convirtieron en un país de claro interés colonizador, así que en el siglo XIX los franceses instalaron allí un protectorado, y el país no alcanzó la independencia hasta mediados del siglo XX... para entrar de lleno en una guerra civil auspiciada por los intereses norteamericanos en la zona y la guerra de Vietnam.
Así, en 1975 Pol Pot se hizo con el poder, llevando a Camboya, en el periodo de 4 años a una "reestructuración social" del país que supuso un genocidio de más de 1 millón de personas en la década de los 70... que se propagó con los distintos conflictos y guerras que involucraron a Vietnam, China, Tailandia etc.....
Finalmente, en el año 93 Camboya celebró sus primeras elecciones, bajo el paragüas de la ONU, y se estableció una Monarquía Constitucional, pese a que los seguidores de Pol Pot, los Jemeres rojos aún siguen siendo una amenaza.
Entrando ya en el apartado culinario... este ya más de nuestro interés, ¿verdad? os puedo contar que su comida es muy similar a la que se puede comer en la región, la comida vietnamita, india o china... lo que significa mucho arroz, especias, pescado y sobre todo platos muy ricos en proteínas, carbohidratos y vitaminas que con pocas cantidades cunda para todo el día.
La cocina jemer (camboyana), es variada, rica en especias autóctonas como la canela, el tamarindo o el cilantro... que sirve de base para sus currys a los que añaden otros ingredientes como limoncillo o hojas de lima kaffir. Asimismo han adoptado prácticas de sus vecinos... como el uso de la salsa de soja, la cocina al vapor, el consumo de sopa o... el horneado de pan que aprendieron bajo el dominio francés.
Como podéis ver es una cocina rica, muy influenciada con lo mejor de cada cultura que les ha marcado de alguna manera pero en la que prima, como os he contado antes el consumo del arroz... que sirve tanto de plato principal en las mesas más humildes como de guarnición de otros platos.
A parte del arroz, el ingrediente más utilizado es el pescado... el pescado de agua dulce en concreto... que o bien conservan secos, o bien lo cocinan a la parrilla, en sopas o currys.
Yo, para elegir la receta que quería preparar para el reto, me dediqué a repasar recetas, a buscar... a pensar algo exótico pero que en casa nos gustara seguro... ¡¡y encontré este curry!! La verdad es que preparar este tipo de platos es bastante complicado... no ya por la técnica etc... sino por los ingredientes que hay que emplear para ello... yo os voy a contar lo que emplee yo... pero os dejo enlace al blog donde encontré la receta para que veáis la diferencia... me faltaron ingredientes como el limoncillo, la pasta de curry roja o las hojas de lima kaffir, con lo que, seguramente, mi curry no fue camboyano al 100%.
- 2 dientes de ajo triturados
- 1 cucharadita de jengibre fresco rallado
- 2 cucharadas de aceite de sésamo o de girasol
- 2 pechuga de pollo en trozos medianos
- 1/2 cebolla roja en juliana
- 2 zanahorias en tiras finas (pero no con rallador... sólo en tiras)
- 1 patata mediana troceada en cubos
- Un puñado de judías verdes redondas (las mías de bote, ya cocidas)
- 1 lata de leche de coco
- 1 taza de caldo de pollo o en su defecto de agua
- 1 cucharadita de maicena
- 1 pizca de azúcar
- 1 pizca de sal
- 200 gramos de arroz thai o de jazmín para acompañar
Modo de hacerlo:
1. Comenzamos lavando el arroz en un colador bajo el chorro del agua fría. Lo lavamos bien hasta que el agua que cae al fregadero está completamente limpia de nuevo. Dejamos escurrir y reservamos.
2. Ponemos en una cazuela o en una sartén unas cucharadas de aceite de sesamo que dejamos calentar ligeramente. A ese aceite le incorporamos los dientes de ajo picados y un par de cucharadas de la pasta de curry... sofreímos un poco y añadimos la leche de coco.
3. Pasados 5 minutos, que ya esté hirviendo despacito incorporamos los trozos de pollo ligeramente sazonados, y dejamos que se cocine en el curry durante unos minutos.
4. A continuación incorporamos la zanahoria y la patata, y cuando pasen otro par de minutos la cebolla y las judías verdes.
5. Vertemos finalmente el caldo y añadimos la cucharadita de maicena desleída en el caldo para que la salsa espese un poco.
6. Condimentamos con sal, azúcar y un poco más de curry si os parece que sabe poco...
7. Tapamos y dejamos que cueza a fuego medio unos 20 minutos... hasta que esté bien hecha la patata, jugoso el pollo y la salsa espesa y bien rica.
8. En esos 20 minutos ponemos también el arroz a cocer... ponemos el arroz reservado en el colador en una cazuela, cubrimos de agua y llevamos a fuego medio hasta que esté tierno, sacamos entonces de nuevo al colador, escurrimos y reservamos hasta el momento de emplatar.
Yo he servido el curry en estos boles tan vistosos... pero que cada uno lo haga como quiera... incluso mezclado con el arroz.
Además... podéis sustituir el pollo por más verduras como col china, brócoli o puerro y marcaros una receta completamente vegana.
Y eso es todo.... me alegro de haber llegado este mes a participar en el reto... ya veremos que pasa con la letra D famosa.
Mil besos a todos y terminar muy bien el fin de semana!!
Luz.