No tendrán pìedad con ellos
Richard Bone está tocando fondo. Sus actividades como gigoló playero en Santa Barbara no van especialmente bien, y le han arrojado a una indigencia de la que le recoge Alex Cutter, un veterano de Vietnam tullido, trastornado y explosivo, con un gran carisma entre las mujeres (como su esposa Mo, o la joven Monje), pero que resulta estar de vuelta de todo, lleno de odio y desesperación, y cuya única válvula de escape es el alcohol y su feroz diatriba contra todos aquellos que le rodean.Al regresar a la casa de Cutter, tras un penoso día, Bone es testigo de cómo un hombre abandona el cadáver de una joven en un contenedor de basura. Y algún tiempo después cree que el autor de dicho abandono es J. J. Wolfe, un próspero empresario, y un auténtico prócer de la comunidad. Y Cutter decide que es una situación magnífica para que éste les dé algo de su dinero, a cambio de su silencio.Esta pretensión resultará dramática para esta pareja de desesperados, pues intentando resolver su vida, descubrirán un auténtico nido de víboras, que no tendrán piedad con ellos, lo cual llenará el relato de numerosas y terribles peripecias.
desafortunada mezcla: lujuria y alcohol, juventud y edadEl libro nos hablará de los hombres que han llegado a tocar fondo existencial, uno, un malehrido en la guerra de Vietnam, que no encuentra solución ni paz en su desgracia, y la de otro, un hombre que tras emprender una vida ajustada a los estándares sociales imperantes, tiró por la borda, trabajo, familia y reconocimiento, abandonándose en un perfil inquietante de la existencia.El relato de las peripecias de estos dos estafadores nos llevará desde la dorada y cosmopolita costa californiana, a la región de Ozark, en Missouri, reducto de lo que podríamos denominar la América más profunda, en la que se contraponen el presunto aperturismo californiano, con su radical mensaje de amor y justicia (apuntemos que nos encotramos a principios de los años 70), con los usos y costumbres de una América interior, sustentada en la trinidad del licor puro, un Dios celoso y terrible, y, por encima de todo, la «estirpe»: un concepto cuyo corolario consiste en una desconfianza y un odio instantáneos hacia todo aquel que no forme parte de ella.De esta forma, seremos espectadores del brutal encuentro que significará esta desafortunada mezcla de lujuria y alcohol, de juventud y edad, de la California vivaz y alocada y las oscuras furias de las montañas del interior de los EE.UU. Y todo esto con una crítica despiadada al mundo de los hippies y los movimientos radicales norteamericanos, de los que señala sus inconsistencias teóricas y factuales.Novela subyugante, por las historias que nos relata, por la fuerza de sus personajes, a los que acompañaremos en sus peligrosas peripecias, de los que se hace un lúcido y abrumador retrato de cómo un hombre puede desbarrancar vitalmente, y los infiernos a los que se ve arrastrado. Y todo esto encaramado en una prosa firme y llena de matices, que nos permite establecer una relación de complicidad con dos tipos tan difíciles como son los protagonistas. Una impactante y extraordinaria novela.Sajalín, 2016Compra en Casa del Libro
José María Sánchez Pardo