Atrévete: da el salto con Rossini y sumérgete en la ópera. Hoy, Gioachino Rossini, compositor nacido un 29 de febrero, cumpliría 220 años. ¿Llevamos más de dos siglos disfrutando con El Barbero de Sevilla y tú aún no lo conoces? Generación tras generación hemos reído y vibrado con las tribulaciones de Fígaro. Aprovecha el día del salto (nombre con el que los ingleses conocen al 29 de diciembre) y escúchala. Te quedarás enganchado para siempre. Y te lo pasarás fenomenal!!
La ópera y la literatura se han unido en muchas ocasiones ofreciendo resultados muy atractivos. El mundo de las grandes divas siempre ha sido glamuroso e intrigante. Muy propicio para misterios y crímenes como el que Donna Leon presenta en Muerte en La Fenice. Aquí el director de ópera Helmut Wellauer es asesinado en un descanso de La Traviata, en el palacio de la ópera de la Fenice de Venecia. El inspector Brunetti será el encargado de resolver el crimen. Una novela negra muy original en la que la ciudad de Venecia es una protagonista más con sus recodos, sus palazzos, y sus pequeños restaurantes. Gastronomía, turismo y música combinado con intriga ¿alguien da más? Un entretenimiento fabuloso para el fin de semana y más si de música de fondo escuchas a Rossini.
Si quieres algo más profundo te recomiendo esta pequeña joya de Javier Marías: El hombre sentimental. La historia de un triángulo amoroso que se rompe. El narrador es un cantante de ópera que viaja en tren de Venecia, otra vez Venecia, a Madrid para representar el Otello de Verdi. En ese tren ve por primera vez a Natalia Manur, a su marido, un banquero, y a Dato, un extraño acompañante. Días después de este primer encuentro, le proponen un acercamiento a la mujer. A partir de entonces, Dato y Natalia se harán asiduos a los ensayos del Otello donde el cantante, conocido , como el león de Napoles, canta el papel de Cssio. La historia tendrá un inesperado desenlace. La mayoría de las veces la ópera se asocia al malvado de la trama. Pero lo cierto es que los amantes de la música en general, y de la ópera en particular, somos gente muy tranquila. Capaces de llorar con una simple aria y reír a carcajadas con un personaje bufo como el barbero de Sevilla. Adelante da el salto!!