En el encabezamiento de este apunte coloco el enlace directo al Blog La Lumière, del periodista François Koch, que el pasado día 5 entrevistaba a Daniel Keller, flamante Gran Maestro del Gran Oriente de Francia.
Se trata de la primera entrevista concedida a un medio de comunicación -l´Express- por Daniel Keller, y de ahí que pueda resultar interesante para algunas personas.
Desde aquí mi agradecimiento a François Koch por su autorización para la traducción de su trabajo y su publicación en español en Memoria Masónica.
** *
Francmasones: Daniel Keller hace un llamamiento en favor de un "humanismo combativo"
Por François Koch. Publicado el día 5 de septiembre de 2013
El nuevo Gran Maestro del Gran Oriente, primera obediencia francesa, quiere movilizar a sus hermanos contra los enemigos del humanismo y convertirse en los polvos pica pica de los políticos. Ejecutivo, 54 años, Daniel Keller ha celebrado su primera entrevista con L´Express.
Ha sido Ud. elegido Gran Maestro del GODF asumiendo una postura de candidato de la ruptura frente al continuista. ¿En qué sentido su obediencia ha favorecido la visión a corto plazo ante los diferentes retos sociales?
Las grandes leyes de la III República se prepararon por el GODF con una anticipación que como media osciló entre los diez o quince años. Por ejemplo, una ley importante como la de la Escuela pública, laica, gratuita y obligatoria, de 1882, fue discutida en las logias a principios de la década de 1870. En esta época la Francmasonería es la antecámara del mundo del mañana. Es necesario que reorganicemos en el momento actual nuestra reflexión colectiva para volver a poder anticiparnos.
Y a largo plazo ¿qué temas deberían primar para el GODF?
¿Cuál va a ser la democracia del día de mañana? Vivimos una época de cambio y asistimos al final de un modelo que fue ideado al acabar la guerra y que a día de hoy está en crisis.¿Cómo podemos darle un nuevo empuje a la justicia social? Semejante reflexión no va a venir del Gran Maestro y de sus atronadoras declaraciones.
¿Es Ud. tan pesimista como Michel Barat, Alain Bauer y Roger Dachez, para los que las obediencias masónicas no producen más que agua tibia en el mejor de los casos cuando no absolutamente nada?
No creo que haya que ser pesimista. La francmasonería ofrece un sistema de producción intelectual original y atípico. Compleja, lenta y laboriosa, la coordinación del trabajo de 1200 logias merece nuestro esfuerzo. En caso contrario sólo tendremos agua templada. Estamos en el principio de un recorrido durante el cual hemos de saber motivar a las logias y preocuparnos por recoger su producción.
¿Por qué la obediencia no sabe dar el valor que corresponde al trabajo que hacen las logias?
Porque existe una fuerza gravitatoria sociológica, una falta de inventiva, de impulso. Habrá que nadar a contracorriente, algo que desgraciadamente no es nuestra tendencia natural.
¿Cómo puede volver a tener el GODF esa capacidad perdida de ilustrar hasta poder convertirse de nuevo en una referencia intelectual?
La situación del GODF hoy no es la misma que en 1900, época en la que junto con la Liga de Derechos del Hombre era prácticamente la única fuerza existente. Era una época en la que no resultaba nada extraño encontrarse con un venerable maestro de una logia que también podía ser presidente de un consejo general, y donde también había un buen número de diputados en los talleres. Pasado un siglo, son muchos los grupos capaces de articular una reflexión, han aparecido "think tanks" que manejan un conocimiento de forma más competitiva que como lo hace el GODF. Tenemos que reflexionar sobre los valores de la sociedad, sobre sus principios de organización. Pero no somos ni un "think tank" ni un grupo de expertos.
Parece un poco impreciso, ¿no?
En absoluto, pues bien podemos temer estar ante el principio del cuestionamiento de este humanismo...
Un "humanismo de combate", según dice Ud. ¿Eso qué es?
Mantenemos una confrontación con un anti humanismo irracional, que no hace sino exacerbar las pasiones más irracionales. En un momento en el que tiene lugar una crisis política, económica y social, hay que reencontrar ese humanismo combativo, porque el humanismo tiene enemigos y hay que tener el valor de enfrentarse a ellos.
¿Quiénes son estos enemigos?
Los nacionalismos en Europa, la extrema derecha en Francia, a la que de manera inconsciente se ha banalizado. Son amenazas, peligros potenciales. Al igual que los integrismos, o algunas religiones más parecidas a un nuevo opio, una tirita para la crisis.
Ud. quiere que el GODF sea independiente de los partidos. ¿Acaso no lo ha sido suficiente?
No tengo nada contra los partidos políticos. Sin ellos, no hay democracia.Pero el GODF no tiene ni las características ni las capacidades de un partido político. No buscamos la conquista del poder.
Ud. ha considerado que el GODF no ha guardado suficiente distancia con respecto al Partido Socialista...
Es necesario que nos mantengamos por encima de los partidos políticos. Al tratar de nuestros valores, o sobre cuestiones de carácter social, tenemos la vocación de ser contestatarios con respecto a los partidos políticos, ya se trate del Partido Socialista o de cualquier otro. Sueño con una situación en la que sea posible que el GODF tenga capacidad para interpelarlos, de manera crítica, y sobre la base de nuestros proyectos.
Un GODF más "pica-pica"
Sí. Tenemos la oportunidad de desafiar a los partidos políticos y a quienes ejercen el poder exponiendo nuestras intenciones en toda su dimensión.
¿Ayudará Ud. a mejorar la imagen de la Francmasonería francesa?
Me gustaría provocar interés por acercarse a la Francmasonería en aquellos que me escuchan. Los partidos políticos están en crisis, nunca han tenido tan pocos militantes, y otro tanto sucede con las asociaciones. La Francmasonería es una esperanza para el futuro y también un medio destinado a mejorar la sociedad. No somos sino una sociedad que promueve el pensamiento, y tenemos la fortuna de servirnos de un método iniciático muy original. Permite aprender a tomar distancia con las cosas, a escuchar, algo cuya ausencia constituye el principal defecto de nuestros días.
¿Comparte la visión crítica de Barat, Bauer y Dachez sobre el imperialismo autodestructor de las obediencias?
He leído unas cuantas páginas de su libro, "Promesas del alba", Ediciones Dervy, que me han resultado apasionantes. Pero Ud. me parece que caricaturiza un poco. He dicho en nuestro último convento: la obediencia no puede ser un buzón de correos, ni tampoco una organización burocrática y puntillosa. No es ni una agrupación ocasional de logias ni una estructura que pretenda hablar sustituyendo a otros. Hay que saber encontrar un camino entre ambas cosas. Y eso no es posible hacerlo con un sencillo chasquido de los dedos. No toca a nosotros discurrir, aunque será un camino largo y difícil.
¿Va a tratar de reconstruir la unidad de la Francmasonería francesa destruida hace diez años?
Todas las obediencias son bienvenidas sobre la base de nuestros valores y principios: el respeto a los otros y a uno mismo, la tolerancia mutua y la libertad absoluta de conciencia. Luego tiene que intervenir la diplomacia. Pero esta no es mi preocupación prioritaria. Es decir, es importante el diálogo y el hecho de compartir unos valores que son comunes, pero no hay que buscar acercamientos a marchas forzadas, ni tampoco fusiones-adquisiciones. No tengo la ambición de lanzar una OPA sobre otras obediencias. En cualquier caso, es necesario encontrar el terreno propicio para nuestra convergencia, para ser solidarios y para el desarrollo de acciones comunes.
¿Cómo va a actuar el GODF con la Confederación masónica de Francia (4 obediencias, 52.000 hermanos... como el GODF)?
Dos de las cuatro obediencias de la CMF, la Gran Logia de Francia (GLDF) y la Gran Logia tradicional simbólica Opera (GLTSO), estaban presentes en nuestro último convento. La GLDF y la GLTSO no han roto el diálogo con el GODF. Y vamos a hablar. Y luego veremos. La CMF apenas sí balbucea y nadie puede conocer cuál va a ser su futuro.
¿Mejorarán las relaciones con la GLDF?
Estoy abierto al diálogo sobre la base de nuestros principios y valores. Las relaciones entre la GLDF y el GODF son tan antiguas que a través de la historia han pasado por muchos altibajos... Y los seguirá habiendo. Esto en sí no constituye un problema irresoluble, pues los hombres y mujeres de buena voluntad siempre pueden hallar puntos de encuentro. Hay que tomar un poco de altura. No seré yo quien cree problemas. Hay cosas mucho más importantes.
¿Cuáles?
La recuperación del interés que la Francmasonería ha de tener en la sociedad, y el trabajo que hay que llevar a cabo para mejorar su imagen. Estoy preocupado porque cosas como cortar árboles de la laicidad que se acaban de plantar, o por manifestaciones hostiles que tienen lugar delante de los templos masónicos, o por pintadas que aparecen en sus paredes. Sería un error tomar todo esto a la ligera.
Ha sido calificado Ud. como el primer Gran Maestro "bauérien" (afín a la "corriente" de Bauer) tras la finalización del mandato de Alain Bauer hace diez años.¿Qué tiene que decir?
Lo tomo como un cumplimento. Decir lo contrario sería de mala educación. Pero la realidad es que lo conozco bastante poco. Es decir, no hay una relación consistente entre él y yo. Al menos por el momento. Quizá podría ser el caso si nos encontráramos alguna vez.Et si omnes, ego non.