Darth Vader: ¿discapacitado o persona en situación de discapacidad?

Por David Ormeño @Arcanus_tco

El muy malo de la película Star Wars es una persona con más de una limitación objetiva, pero puede desenvolverse funcionalmente dentro de su entorno directo y posiblemente indirecto; por lo que la situación de discapacidad no existiría.

por Claudio Krug

A manera de ilustración, y como pie de mástil de esta columna, debo inspirar al lector en el concepto de experiencia moral o, dicho de forma más simple, el presente continuo; instancia inherente al hombre, que nos es parte de la experiencia neta, relativa a: la vida cotidiana, observación, aprendizaje, respuesta de estímulos vicerales y toma de decisiones. Esta situación permanente, individual y colectiva, es parte central de la común acción, el desarrollo de paradigmas, y la propia evolución natural del hombre, conformado en sociedades con creencias, reglas y formas; incluyendo, obviamente, el comportamiento, los estilos de vida, moda, la estructura valórica, los arquetipos, entre otros.

La historia nos relata de asociaciones que se han convertido en poderes fácticos (guetos, tribus urbanas, entre otras) sin que el individuo tenga el control del entorno, sino, por el contrario, han sido los grupos primarios y secundarios, los que en definitiva conduzcan nuestra opinión y muchas veces la toma de decisiones. Hoy, la sociedad de la información nos permite el acceso a una base informativa inimaginable, donde, a pesar de la influencia de los grupos primarios y secundarios, podemos discernir con mayor responsabilidad, dando paso a una sociedad más responsable e inteligente, dispuesta a resolver los problemas de mejor forma.

Dicho lo anterior, este texto persigue el cambio de la concepción asistencialista y biomédica de la discapacidad (entendiendo ésta como una relación tratamiento-rehabilitación), hacia el cambio a la inclusión social de las personas en situación de discapacidad desde lo funcional, el entorno y sus barreras. Esto nos facilitará nuestra experiencia moral, para dar paso a una sociedad inclusiva.

El tratamiento de la situación de discapacidad apunta a las propuestas o modelos que no otorgan obstáculos para la intervención de carácter funcional de las personas que presentan alguna limitación, deficiencia o carencia. Siendo la inclusión un proceso natural, gobernado por la accesibilidad y el diseño universal.

Esto nos permitiría entender que el antagonista, el muy malo de la película Star Wars, el señor Dart Vader, es una persona con más de una limitación objetiva, pero puede desenvolverse funcionalmente dentro de su entorno directo y posiblemente indirecto; por lo que la situación de discapacidad no existiría , ya que producto de la tecnología para la medicina asociada al cuerpo humano, la accesibilidad y el diseño universal, el señor Vader puede desempeñar sus actividades y acciones, sin limitaciones de ninguna especie.

La situación de discapacidad aparece cuando la función y el entorno no permiten que esa persona pueda desempeñar una actividad u acción concreta. A modo de ejemplo: una persona en situación de discapacidad visual no puede conducir un automóvil, pero cuando ésta tenga acceso a un vehículo autómata, que le permita desplazarse con independencia, esta nueva función adquirida eliminará la situación de discapacidad en esta tarea. Pero, puede nuevamente adquirir la condición de situación de discapacidad al no poder leer un letrero en la calle.

Por lo anterior, vuelvo a repetir, el señor Vader no es una persona en situación de discapacidad, sino una persona que posee varias limitaciones objetivas, siendo un producto cultural estructurado en el concepto del héroe malvado, validado en nuestro conciente colectivo, como así también en el inconsciente colectivo. No conozco su diagnóstico médico general, pero claramente se desenvuelve sin obstáculos ni limitaciones. Entonces podríamos mencionar como ejemplo:

Una persona necesita cruzar la calle, al lado de el se encuentra una persona en silla de ruedas listo para cruzar. La muchacha de la silla cruza al dar la luz verde, y la otra le pregunta si puede cruzar ya que ve muy poco.

En este caso la persona en situación de discapacidad es el hombre que no puede cruzar con seguridad la calle, ya que no utiliza ni un bastón ni tampoco el oído para saber si se acerca un vehículo; y no la chica en sillada ruedas, quien realizó la actividad de cruzar la calle como una persona sin situación de discapacidad.

Lamentablemente, para algunas personas que tienen ciertas limitaciones funcionales objetivas, la naturaleza de ésta aún no ha sido resuelta y la eliminación de estas barreras es un desafío. Este tema pone mayor complejidad a los factores del entorno propio de la discapacidad.

La discapacidad Visual, Física, Auditiva, cognitiva, psíquica y viseral, merecen un trato diferente y complejo, desde la accesibilidad, implementación del diseño universal, desarrollo de tecnologías, educación, capacitación, empleo, rehabilitación, recursos humanos especializados, equipamiento e infraestructura. Además de la aplicación de los derechos de las personas en situación de discapacidad, cuerpos normativos, políticas públicas, recursos, y cultura sobre el trato de las personas en situación de discapacidad, estos múltiples elementos, que merecen un tratamiento individual como así también un análisis general, son los factores que aún complican más el entendimiento, como así también los modelos sistémicos para la eliminación de las barreras.

Todos estos elementos son un cocktail difícil de tomar y entender, pero, para mayor descripción, me permito hacer la reflexión: El Sr. Vader no es una persona en situación de discapacidad, además, tiene un trabajo remunerado, claramente no se cuanto percibe por concepto de sueldo, pero me tinca que gana muchas lucas. Además, es diferente, muy diferente, físicamente viste un traje negro, como de plástico, y una máscara que le permite ver y respirar. En la estrella de la muerte todos lo respetan por ser un Jedi, pero ¿hasta dónde llega la tolerancia del entorno de las personas que trabajan con él? en alguna escena por ahí, escuché a más de alguien, cuando Vader se saca la máscara: "Que feo, no quiero ni ver", "me da pena", "está pal gato", etc. Claro, es un personaje televisivo masivo que busca exactamente provocar eso en el receptor o audiencia.

Ahora bien, ¿somos tolerantes, tenemos cultura de trato hacia las personas en situación de discapacidad, asumimos la diferencia?, la verdad no lo creo.

Desde mi propia experiencia me he planteado esta pregunta, y recuerdo claramente siendo niño haberme burlado y reído, quizás por inseguridad o un primer encuentro involuntario, de una persona en situación de discapacidad. El adulto que me acompañaba tampoco me explicó, quedó horrorizado por mi actitud, no hizo ninguna referencia, o algo por el estilo, no supo enfrentar la situación y, como buen chileno, se hizo el tonto. Nadie me dijo nada, y sólo luego de adquirir una serie de limitaciones de carácter objetiva, que me condicionaron a una situación de discapacidad, pude entender esta realidad. Fue esta experiencia, y el trato histórico como chilenos que les hemos dado a las personas en situación de discapacidad, lo que nos lleva a encontrarnos con números lapidarios en empleabilidad, acceso a una educación de calidad, entre otros. Pero todo parte desde lo empírico, la experiencia, la experiencia moral. Esta invitación es individual y transferible.