Es imposible enumerar todas las regiones que cultivaban el árbol de la palmera en el IV milenio a.C.
El dátil se empezó a consumir fermentado como bebida alcohólica. Los egipcios lo tomaban como vino, siendo una bebida de alto contenido alcohólico.
En culturas posteriores empezó a utilizarse como ingrediente dulce, lo combinaban con masa de pan, la cuál era endulzada con miel o frutas como higos y azufaifa ( dátil rojo).
Son curiosos los datos que se encuentran referentes a dietética y cocina. El estudio de los menús franceses de la Edad Media y el Renacimiento, demuestran que cada fruta se presentaba en el momento indicado por los médicos. Es interesante que se sirviesen como entrada las frutas “ligeras”, como albaricoques y cerezas, luego melocotones, ciruelas, los frutos secos ya se presentaban como postre, las avellanas, los piñones, las almendras. El dátil se consideraba una fruta húmeda y caliente por eso formaba parte del postre.
Realmente el fruto de la palmera fue y es consumido por todas las capas de la población. Actualmente sigue siendo un alimento fundamental para los habitantes del Sáhara. En muchos libros lo llaman el oro de oriente próximo y vamos a ver por qué
Características y propiedades del dátil
El dátil es una fruta desecada natural, no se somete a un proceso de desecación, sino que se seca al sol en el mismo árbol y después se recolecta.
Es el fruto de la palmera datilera, y tiene un color amarillo dorado cuando está maduro. Su carne es blanda y su sabor dulce. Los dátiles son originarios de Oriente Medio y el norte de África. Entre los más comercializados se encuentran el dátil tunecino Deglet Noor, “dátil de la luz”, de piel lisa y brillante, considerado el mejor de todos, y el dátil Medjool, de piel arrugada y textura parecida a la de un caramelo toffee. En cuanto a España, los de Elche (Alicante) son de muy buena calidad.
Es una fruta rica en azúcares y calorías, su consumo está muy indicado si practicamos deportes de larga duración o esfuerzos físicos intensos. En cambio no es apropiada en personas con sobrepeso y obesidad, porque su contenido calórico es alto. Si padeces diabetes es una fruta con un elevado contenido en azucares simples, por lo que no es aconsejado su consumo.
En esta fruta exótica abunda la fibra soluble, que tiene capacidad de formar geles viscosos que fijan la grasa y el colesterol, con lo que disminuye la absorción de dichas sustancias; razón por la cual el consumo moderado de frutas desecadas, en este caso el dátil, es positivo si padeces hipercolesterolemia (niveles altos de colesterol en sangre), si ésta no va asociada a exceso de peso.
Los dátiles, al ser un alimento rico en potasio, ayudan a una buena circulación, regulando la presión arterial por lo que es un alimento beneficioso para personas que sufren hipertensión.
También podemos destacar el magnesio que contiene el dátil. Es habitual el déficit de este mineral en dietas ricas en alimentos refinados (cereales blancos, como el arroz, la pasta y azucares.) y pobre en frutas y verduras. Para asegurarnos un buen aporte mineral no hacen falta pastillas. Sino llevar una dieta donde cada día haya fruta y verdura, cereales preferiblemente integrales y proteínas, baja en grasas saturadas y cocinado todo con poco aceite y con mucho cariño.
Las frutas desecadas suelen resultar más indigestas que las frescas, por lo que su consumo no se recomienda a quienes padecen problemas digestivos (digestiones lentas y pesadas, flatulencia, estómago delicado…), si bien las pueden tomar en forma de compota.
Los dátiles contienen tiramina, una sustancia que provoca constricción de los vasos sanguíneos, lo que puede provocar migraña en personas propensas.
Os dejo a continuación una rica y sencilla manera de utilizar los dátiles como ingrediente en la cocina. Se adapta fácilmente a sabores dulces y salados. Éste ejemplo puede ser un perfecto entrante y un plato nutritivo. A ver qué os parece.
Receta de saquitos rellenos de dátil y queso
Ingredientes para 4 personas ( 2 saquitos por persona)
8 dátiles - 1 tarrina de queso fresco
- 1 manzana golden
- 8 hojas de pasta filo
- huevo para decora
Preparación
- Cortamos los dátiles a trocitos pequeños
- La manzana mejor prepararla en el justo momento en el que vayamos a rellenar los saquitos, así evitamos que se oxide.
- Extiende las hojas de pasta brick sobre una superficie lisa. Rellénalas con el dátil, una cucharada sopera de queso fresco y 4 o 5 trocitos de manzana. Ciérralas con cuerda de cocina como si fueran saquitos. También puedes usar tiras de puerro para amarrarlos.
- Pinta con un pincel mojado en huevo los saquitos, así conseguirás un resultado brillante y vistoso.
- Hornéalos a 190ºC durante 8-10 minutos
Puedes tomarlos calientes o fríos. Van muy bien como entrantes, eso sí son bocaditos de alto contenido calórico. Si estás cuidando tu peso, puedes hacerlos con manzana y queso fresco sin añadir el dátil.
Sea como sea ¡a disfrutar!
Recordar que el dátil es una fruta interesante y recomendada en personas con una actividad física intensa y un desgaste calórico elevado. Es rico en minerales y fibra. Mi recomendación es que lo usemos de manera ocasional como ingrediente en la cocina, por ejemplo. Ya que nos aporta dulzor a los platos, aumentamos el contenido nutricional y un sabor exótico y especiado muy llamativo.
El artículo Dátil, el oro de oriente próximo apareció publicado primero en Dietistas-nutricionistas, portal de nutrición.