David Koresh - Secta de los Davidianos

Publicado el 18 agosto 2012 por Aguila63
Nació el 17 de agosto de 1959 como Vernon Wayne Howell.
Vivía en Houston - Texas - EE.UU. y fue el líder de la secta cristiana apocalíptica de los Davidianos.
Al igual que otras sectas parecidas y sobre todo de aquella época, David era uno de los muchos "predicadores" apocalípticos que habían en Estados Unidos aterrorizando a sus seguidores con todo tipo de calamidades individuales y colectivas, excepto si les seguías a ellos y formabas parte de un grupo muy restringido que lograría salvarse cuando toda la humanidad desapareciera.
Koresh seguía al pie de la letra la Biblia y eso le venía de lejos. En su época de estudiante, que le iba bastante mal, provocó y al mismo tiempo quiso compensar a sus profesores con la memorización de todos los textos bíblicos.
Después, cuando se hizo líder de los Davidianos, creía que era la nueva reencarnación de Jesucristo y anunciaba castigos divinos, invitando a toda la gente a que lo siguiera a él para poder salvarse.
David llegó a dirigir la secta de los Davidianos a través del matrimonio con una niña de 14 años llamada Rachel Jones, que era la hija de uno de los dirigentes de esa secta y al que sustituyó de inmediato, pasando a ser él mismo el más alto poder del grupo.
Ganó muchos adeptos de varias partes y estuvieron en algunos lugares mientras él se escudaba en su obra como "predicador", hasta que logró montar su particular mausoleo en un rancho cerca de Waco - Texas.
Se armó hasta los dientes, comprando armas por valor de más de 250.000 dólares con la excusa de armarse para la llegada del momento del "mal".
Mantenía relaciones sexuales con adolescentes, a las que llamaba esposas y forzaba a sus seguidores a entregarle grandes cantidades de dinero.
Con todo aquel dinero fue almacenando muchas armas, metralletas M16 y otros objetos militares.
En Waco permanecían de incógnito y allí pudo retener a sus seguidores. Muchos de ellos intentaron irse pero no pudieron hacerlo. El rancho era como un fuerte vigilado de donde nadie podía salir.
Sus seguidores iban vestidos con túnicas anaranjadas y habían muchos niños, mujeres, jóvenes. Muchos de aquellos niños eran de él mismo.
El 28 de febrero de 1993, agentes de policía fueron al rancho Monte Carmelo porque acusaban a la secta de tenencia masiva de armas y de abusos sexuales a los menores que vivían en el rancho.
Un periódico de Texas había investigado algunos informes en los que Koresh era acusado de abusar de niños en el rancho. Las acusaciones las habían hecho algunos pertenecientes al grupo que habían logrado salir de la secta.
Los agentes fueron recibidos a tiros y contestaron de la misma manera. Aquel día murieron cuatro agentes y una decena de sectarios fueron abatidos.
A partir de aquel momento comenzaría el fin de los Davidianos.
Durante los siguientes 51 días se produjeron muchos disparos por las dos partes, muriendo muchas personas entre federales y sectarios.
En algunas ocasiones parecía que llegarían a algún tipo de acuerdo, pero nunca se producía.
Las autoridades intentaron de todo para que los Davidianos se rindieran y se entregaran, además de los tiros y el uso de armas, utilizaron gases prohibidos que arrojaban dentro del rancho. Finalmente lo intentaron mediante una guerra psicológica.
Les cortaron la luz, el agua, la llegada de alimentos y por las noches, les ponían reflectores muy ponentes que daban a las ventanas del rancho y así impedir que los sectarios pudieran descansar, también ponían música de rock a todo volumen con unos potentes altavoces, querían acabar con ellos a toda costa. Pero nunca se vieron ambulancias ni bomberos, para una situación que se veía venir catastrófica.
Finalmente, el 19 de abril sobre las 5.30 h, sin que nadie sepa quien comenzó con los disparos. Los tanques del FBI atacaron el rancho definitivamente.
Los asaltantes lograron abrirse camino entre las llamas que consumían el edificio del rancho y cuando llegaron, vieron los cuerpos carbonizados de los seguidores de Koresh, incluido el de él mismo, con un disparo en la frente.
En aquella batalla apocalíptica que Koresh provocó, murieron 69 adultos y 17 menores, todos calcinados.  Las imagenes del desenlace recorrieron el mundo.
Según la versión oficial de la policía, los mismos Davidianos provocaron el incendio en un aquelarre de suicidio colectivo, algo que se ha estudiado mucho después y se ha confirmado que fue así. Pero Koresh no murió como los demás, él falleció de un disparo en la cabeza.
También hubieron otras versiones que decían que los tanques federales habían provocado la inflamación del queroseno y a su vez, habían trasladado las llamas al interior del rancho.
Los adultos que sobrevivieron al asedio fueron detenidos y sentenciados por crímenes. La mayoría de las penas se redujeron y otras condenas fueron anuladas.
Los Davidianos siguen ocupando la zona y han construido monumentos para conmemorar aquellas muertes.
Esta "rama davidiana" es un movimiento diferente e independiente completamente a los Davidianos fundados por Victor T Houteff. Al parecer, la conducta Davidiana se rige por parámetros enteramente cristianos.
David Koresh, como otros muchos sectarios, utilizó una organización pacífica que ya estaba creada para difundir las locuras de los típicos "predicadores" apocalípticos que lo que hacen es transformar un movimiento o grupo en una secta (si no lo era en su momento) y sobre todo y como pasó en otros muchos casos en aquella época y en los tiempos actuales, para dar rienda suelta a los abusos sexuales y las ansias de poder. Aunque la mayoría de estos grupos son sectarios, en muchas ocasiones no cometen ningún delito, hasta que llega el típico "líder" que lo cambia todo, para bien o para mal.