De algas, moscas y lavanderas

Por Pin

Esta es una historia de interconexiones, una de tantas que ocurren en la naturaleza asturiana, y sin cuya existencia no se podría explicar. A principios del verano comienzan en muchas playas y estuarios asturianos los grandes arribazones de algas, algas que comenzaron a crecer con más fuerza a finales del invierno gracias al aumento de las temperaturas y el incremento en las horas de luz solar.



 En playas como la de Bañugues, a las cuales corresponden estas fotos tomadas en los primeros días de agosto, estos arribazones son muy apreciables. Se trata de algas arrancadas por el oleaje con ocasión de algún temporal, y vistos de cerca componen un impresionante collage de color.

Estos arribazones de algas suponen un aporte considerable de materia orgánica a la costa, y en la naturaleza nada se desperdicia. Diversos invertebrados se aprovechan de este repentino aumento de recursos, y entre ellos están unas moscas de litoral, del género Fucellia. Las que se encuentran en Asturias pertenecen por lo que parece a la especie Fucellia tergina.



Estas moscas se encuentran a lo largo de todo el año en el litoral, pero con las arribazones aumentan de manera exponencial. Ponen los huevos en las algas y las larvas contribuyen a su procesado y descomposición. El día que se tomaron estas fotos cientos de ejemplares se distribuían por todas partes en la línea de marea.


Y ahora llega la tercera parte de la cadena, el tercer eslabón. Esta explosión de moscas y otros invertebrados supone un reclamo para diversas especies de aves, para las cuales supone un recurso trófico inesperado. Entre ellas y de forma destacada están las lavanderas blancas. En las lavanderas este recurso nuevo es muy beneficioso, para los adultos porque tras la cría entran en una de las épocas más difíciles del año, la muda del plumaje. Y para los jóvenes porque les ayuda a sobrevivir en las primeras etapas de su vida, en las que pueden pagar cara su inexperiencia.



En definitiva, estos arribazones suponen una gran transferencia de recursos desde el mar al medio terrestre. La materia orgánica producida por los organismos marinos, las algas, sirven para el correcto equilibrio de los medios terrestres. Las algas no son basura más que en la mente utilitaria del ser humano.