Es nuestro cuarto día en Tailandia. El resto de entradas que voy publicando las podéis ver aquí:
http://losdelasclaras.blogspot.com.es/search/label/Tailandia
Hoy marcharemos de Bangkok para dirigirnos a Ayutthaya donde pasaremos la noche.
Hay varias formas de llegar hasta Ayutthaya desde Bangkok:
La manera más rápida son los minibuses o furgonetas. Tienen una frecuencia de entre 20 y 30 minutos.
Estas furgonetas o minibuses tienen la salida en la estación de autobuses junto a Victory Monument. La misma estación donde la tomamos para ir al mercado de Amphawa.
Otra forma de llegar es mediante los autobuses:
Los autobuses con dirección a Ayutthaya salen desde la estación de autobuses del Norte de Bangkok llamada Bangkok Northern Bus Terminal. Tienen una frecuencia de entre 20 y 30 minutos, con horarios desde las 5:30 hasta las 18:00 aproximadamente.
La opción de desplazamiento más económica y también la más lenta es el tren. Los trenes con destino Ayutthaya salen desde la estación de trenes de Hua Lamphong, muy próxima a Chinatown.
La duración del trayecto es de entre 2 y 3 horas dependiendo de los retrasos. El precio del trayecto es de 15 baht en 3ª clase, 35 en 2ª y 66 en 1ª esta última con aire acondicionado (nosotros tomamos los de 2ª clase)
En esta web en inglés os explican perfectamene las diferencias entre estas tres clases y muchos más datos interesantes http://www.seat61.com/Thailand.htm#On_board_Thai_trains
Nosotros optamos por esta opción.
Nuestra primera idea era abandonar nuestro hotel de Bangkok, dirigirnos a la estación donde compraríamos el billete hacia Ayutthaya, dejar nuestras mochilas en una consigna y darnos una vuelta por Chinatown y comer por allí.
Pero al llegar a la estación y dirigirnos a la "supuesta consigna" vemos que por una parte los carteles nos dicen que no se responsabilizan de las perdidas que puedan suceder en el equipaje, por otro lado vemos como amontonan maletas y mochilas sin ningún cuidado y por último nos pareció un precio abusivo el que nos cobraban por cada mochila. Intentamos regatear pero no hubo ni la más mínima rebaja por su parte.
Bastante mosqueados con este suceso optamos por sacar los billetes a Ayuttaya y pasar el resto del día por allí.
Fotos de la estación de Hua Lamphong
El viaje no resulta nada pesado, es muy entretenido ver el ambiente del tren donde sus usuarios son en su mayoría gente thai, niños correteando y vendedores de agua e incluso comida pasando cada pocos minutos.
El precio de la embarcación es muy bajo, no recuerdo exactamente pero creo que fueron unos 5 bath.
De paso aprovechamos para negociar con el la visita a los templos de Ayutthaya, ya que la mejor opción para ello es o bien en bicicleta (y entre el calor y las distancias no lo vimos muy prudente) o bien alquilar un tuk-tuk por horas.
Regateando con el acordamos quedar al día siguiente a las 9 de la mañana y el precio fue el de 150 bath la hora para los cinco.
Nos dejó junto a varios hoteles y guesthouse. Estábamos cansados y entramos en el primero que encontramos The Sixty At. La habitación doble nos costó 1.000 bath aunque las había más simples por 600. El hotel bastante aceptable.
Desde el teníamos estas vistas:
Compramos billetes de primera clase, donde además del aire acondicionado incluye una breve parada a comer (incluida dicha comida en el precio). El precio es aproximadamente 300 bath por persona. Y tras la experiencia posterior de coger uno de segunda clase. Os recomiendo sin duda siempre coger un autobús de primera clase.
Cojimos billetes para un autobús que salía sobre las 13.30 y es que con 4 horas tendréis suficiente para ver los templos de Ayutthaya.
Seguimos dando un paseo en busca del Mercado Nocturno de Ayuttaya. Lo de nocturno es más bien por su hora de finalización ya que su horario es de 16 a 22 horas.
Después del caos de Bangkok agradecimos dar un paseo por estas calles libres de tráfico y de la marea humana que llena la capital.
También probé esa especie de gusano, y aunque sin desagradarme en absoluto, me gustaron bastante menos que los saltamontes.
Para comprender la importancia de este emplazamiento es interesante conocer brevemente la historia de Tailandia:
la actual Tailandia fue fundada en 1238. Por entonces se estableció en el norte del país el reino de Sukhotai, considerada por muchos la primera capital del país. Un siglo más tarde, hacia 1351, florecía el Reino de Ayutthaya bajo el mando de Uthong. Sus inmediatos sucesores no tardaron en subyugar a Sukhothai, que en 1378 ya era un reino vasallo y en 1448 pasaba a formar parte integrante del Reino de Ayutthaya. Otros territorios fueron invadidos con éxito en sucesivos periodos, moldeando así las fronteras de lo que sería la nación de Siam (y posteriormente Tailandia). Ayutthaya se mantuvo como capital durante más de 400 años, pero en 1767 la ciudad fue arrasada por el ejército birmano tras dos años de asedio. Muerto el último rey de Ayutthaya, el comandante Taksin decidió trasladar la capital a Thon Buri (por entonces una ciudad independiente de Bangkok, al otro lado del río Chao Phraya) y se convirtió en el primer y único rey de la dinastía Thonburi.
Dejamos la visita de los templos para el día siguiente y nos concentramos en dar un paseo por los senderos cercanos a nuestro hotel viendo la puesta de sol cayendo sobre las siluetas de estos antiguos templos.