Ya conocíamos el Cheese Bar por los comentarios de algunos amigos y siempre nos lo habían recomendado, por lo que imaginábamos que a la hora de preparar un brunch también lo harían bien. Merece la pena que antes de ir, vayáis con la carta bien aprendida porque hay un montón de opciones y combinaciones que aunque lían un poco al principio, te sirven para poder organizar un brunch completamente a tu gusto.
En cuanto al brunch en sí mismo, la verdad es que no decepciona. Además de tener un montón de opciones donde elegir, la mayoría de las cosas que nos sirvieron estaban muy buenas y las raciones eran suficientemente abundantes como para salir más que satisfecho.
Dado que nosotros éramos cinco, puedo enseñaros una muestra bastante amplia de los platos del menú. Nos sentaron en una mesa al principio del pasillo que da paso a un gran salón. Como podéis ver, es un local moderno y elegante, con una decoración muy agradable. La carta también es destacable, de un buen tamaño y que, como ya digo, merece la pena estudiarla con atención dadas las múltiples posibilidades.
Comenzamos con unos cruasanes, unas tostadas con tomate y aceite de oliva. Acompañadas de café, zumos y smoothies.
En una segunda tanda nos trajeron huevos benedictine (que estaban francamente buenos), un cup cake y tortilla de patatas. Como podéis ver, las combinaciones son enormes y puedes montarte un brunch que se acerque más a un desayuno o más a una comida, según lo que te apetezca.
Por último nos llegó el turno de los "platos fuertes", un solomillo con un puré bastante fuerte que para nosotros desentonaba un poco; un rotti de secreto ibérico que estaba bastante bien, sobretodo la salsa; unas tostas de escalibada y, por último, una riquísima tarta de queso.
Aunque no entraba en el menú y, a pesar de estar bastante llenos con toda la comida que nos habíamos tomado, nos animamos con una tabla de quesos de postre. Sinceramente, no creo que nos mereciera la pena: demasiado cara y los quesos no eran gran cosa.
Por todo lo visto, nuestra conclusión es que se trata de un brunch bastante completo, a un precio más que interesante. Si os gusta este tipo de menús es muy recomendable, tanto por lo que ofrece como por el estupendo local. Una buena manera de disfrutar de una mañana de domingo.