Y la última, o penúltima, porque estos van a escándalo por día, ha sido el anuncio de que la Gran fiesta de solidaridad con Cuba se celebrará el próximo sábado 11 de junio en el Alcázar de los Reyes Cristianos. Es decir, un monumento que suele tener unas colas importantes, al que acuden muchísimos turistas y que cierra sus puertas a los visitantes los sábados por la tarde, abrirá ese sábado para que los comunistas celebren una fiesta de solidaridad con su tierra prometida. Ahí queda eso. Además se añade la circunstancia de que esta “fiesta” se celebrará durante el primer sábado de campaña electoral a las elecciones generales del 26 de junio. Y en la gran fiesta colabora el Ayuntamiento de Córdoba, ¡faltaría más! Esta es la Córdoba radical que tenemos, con unos responsables municipales de PSOE e IU, a los que se suman los de Ganemos, Podemos (o como se llamen), que se dedican a guardar minutos de silencio por los terroristas, que con su mal hacer casi se cargan las fiestas de nuestro mayo y que van de charco en charco… Y cualquiera que esté viviendo estas situaciones, ¿quiere esto para el gobierno de España? Para comprarse las palomitas y sentarse a contemplar, si no fuera porque están acabando con Córdoba.
Y la última, o penúltima, porque estos van a escándalo por día, ha sido el anuncio de que la Gran fiesta de solidaridad con Cuba se celebrará el próximo sábado 11 de junio en el Alcázar de los Reyes Cristianos. Es decir, un monumento que suele tener unas colas importantes, al que acuden muchísimos turistas y que cierra sus puertas a los visitantes los sábados por la tarde, abrirá ese sábado para que los comunistas celebren una fiesta de solidaridad con su tierra prometida. Ahí queda eso. Además se añade la circunstancia de que esta “fiesta” se celebrará durante el primer sábado de campaña electoral a las elecciones generales del 26 de junio. Y en la gran fiesta colabora el Ayuntamiento de Córdoba, ¡faltaría más! Esta es la Córdoba radical que tenemos, con unos responsables municipales de PSOE e IU, a los que se suman los de Ganemos, Podemos (o como se llamen), que se dedican a guardar minutos de silencio por los terroristas, que con su mal hacer casi se cargan las fiestas de nuestro mayo y que van de charco en charco… Y cualquiera que esté viviendo estas situaciones, ¿quiere esto para el gobierno de España? Para comprarse las palomitas y sentarse a contemplar, si no fuera porque están acabando con Córdoba.