De chavez no, pero no se habla de lo mal que esta venezuela

Aquí no se Habla Mal de Chávez, Pero Tampoco se Habla de lo Mal que Esta Venezuela

A veces sin querer o a conciencia, nos damos a la tarea de guardar silencio, que en muchos casos pareciera cómplice de un sistema de gobierno salpicado por escándalos, guisos y un sin fin de situaciones políticamente incorrectas que ya ni siquiera vale la pena mencionar. He guardado por casi tres meses silencio ante la situación que nos ahoga, nos desborda y hace un rato ya largo se nos escapó de las manos, he tratado de entender porqué, sin darme cuenta perdí el interés en lo que pasa en mi país, no puedo o no encuentro argumentos para explicarlo, lo llame hastió, molestia, inconformidad o resignación a lo mejor sean todas las anteriores. No es fácil ver como se desbarata el país, ante los ojos impávidos de todos, duele ver cada día como de ser un país rico, pasamos a ser los nuevos andrajosos de América Latina, que van de un país a otro buscando un futuro que aquí les ha sido negado por inseguridad, hambre, miedo o por querer un país mejor para todos. Como me gustaría regresar el tiempo en donde la Bandera tenía 7 estrellas y el caballo del Escudo Nacional pudiera girar de nuevo su cabeza en un solemne acto de rebeldía y verlo cabalgar libre sin miedo por los caminos de mi tierra. Como deseo ver el nombre de Venezuela sin el bolivariano porque eso está demás pues todos somos hijos de Bolívar el Libertador de América y eso no se discute ni mucho menos nos puede ser arrebatado. ¿Cómo pasamos de ser la Pequeña Suiza a la nueva Haiti?, veo con tristeza a través de los medios como mis hermanos duermen en las plazas de otros países a la intemperie, o como ahora somos los nuevos parias del continente, ahora nos discriminan donde vamos, quizás porque estos 18 años de robolución bonita, gesto en su vientre el deterioro social más grande que pueda existir en un país, dejamos de ser tildados de honestos para llamarnos, choros, gorreros, prostitutas y delincuentes. Esa es la imagen que tenemos en el exterior, no puedo juzgar lo que no veo, pero puedo interpretar lo que entre líneas se ve.

Ahora recuerdo con tristeza cuando llegaron las primeras hordas de cubanos al país, con sus zapatos rotos, su ropa harapienta y sus rostros reflejaba el sufrimiento…llegaron para quedarse con el trabajo de los nuestros ahora la historia es otra, los mal vestidos, los necesitados y los desvalidos somos nosotros. De hablar bajito empezaron a gritar, de invitados se creyeron dueños y luego se fueron hablando mal de mi tierra…hoy sin remordimiento creo que somos los neocubazuelos (una mezcla de cubanos con venezolanos, sometidos a un gobierno dictatorial con tintes de democracia), hoy soy testigo del sufrimiento de la nueva colonia…llevada al caos por las políticas inexcusables de quienes apostaron nuestro futuro y bienestar y perdieron.Hoy siento que nos hemos convertido en esclavos sin sueños, en autómatas que van de cola en cola, esperando conseguir alimentos para sobrevivir el hoy, porque ya no existe el mañana…vivimos en el hoy, lejos quedaron las cenas con amigos, las reuniones o tertulias…¿pero cuáles amigos nos quedan? Se fueron, están muertos o quizás enfermos. Hemos perdido las ganas de luchar por un mejor país porque ahora lo mejor que puede pasar para la gran mayoría es que el CLAP llegue cada mes o que el carnet de la patria sea el resuelve de los mantenidos conformistas.No entiendo a mi gente, cuando deposita sus esperanzas en dirigentes que solo velan por sus intereses y bienestar personal, cuando cada problema queda sin solución, cuando cada pregunta que hacemos queda sin respuesta, cuando cada escandalo queda ahogado en la arenga política de un programa de Maduro, la realidad es que, así como quedo prohibido hablar de mal de Chávez también queda excluida de toda discusión lo mal que se encuentra Venezuela por culpa de su clase política sea roja, azul o blanca.Marilin Guerrero   @MarilinGuer1208

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