De desescaladas, informes y la anormalidad

Por Lanena @virginiaELB

¡Hola a todos! ¿Cómo vais? ¡Uf! Ya estamos en la última semana de Mayo. Llevamos más de dos meses en estado de alarma y casi sin salir a la calle. Todos andamos un poco nerviosos y sobre todo estos días ya que Madrid, la ciudad dónde yo vivo, ha pasado a la fase 1.

No sé en vuestras localidades, pero aquí andamos un poco confusos con lo que se puede o no hacer y sobre todo si debemos volver a las calles o no.

Así que cuando recibí en mi inbox un informe de la unidad de Psicología de la Universidad San Pablo CEU me interesó mucho.

Este informe nos ofrece algunas reflexiones para afrontar la vuelta a la anormalidad. (Me niego a decir “nueva normalidad” eso para mí no existe). Y yo voy a comentar los puntos que me parecen más interesantes si bien en la infografía tenéis todos los consejos reflejados. Vamos allá:

Comer bien y sano: Observar la alimentación como un factor de protección de la salud física y mental.

Mi comentario:

Nosotros en casa no hemos cambiado nuestras rutinas de alimentación por estar en confinamiento. Durante la semana siempre hemos controlando lo que comíamos y hemos seguido igual. Los fines de semana no miramos lo que comemos, quiero decir que nos damos algún que otro caprichito sin sentirnos culpables. Y eso también lo hemos seguido haciendo.

Si hemos engordado o no la verdad es que no nos lo hemos planteado, lo que queríamos conseguir es que no se notara tanto que estábamos en una época especial para que cuando acabe no haya diferencia.

Yo no sé lo que pensará el que ha creado el informe de esta forma de llevarlo, pero a nosotros nos está funcionando.

Mantenerse físicamente activo: Este periodo de aislamiento ha servido para descubrir la importancia del ejercicio físico en el mantenimiento de la estabilidad física y mental. La realización de un ejercicio moderado hace que nuestro cerebro segregue en mayor cantidad neurotransmisores relacionados con el bienestar y el buen humor.

Mi comentario:

En nuestro caso (siempre hablo de maridin y de mi. No tenemos hijos.) tenemos una rutina de hacer ejercicio diario y en casa, es algo que llevamos haciendo desde que a mí me pasó lo de las lumbares. Así que, que estuviésemos confinados en casa no ha cambiado nada. Hemos seguido haciendo ejercicio todos los días de la misma forma.

Lo que sí ha cambiado es que no podíamos salir para dar un paseo que eso sería como ejercicio extra.

Mi rutina consta de 45min de elíptica y 20 minutos de una tabla de pilates de estiramientos. Con eso me he mantenido muy bien tanto psíquicamente como físicamente.

Tomarse un descanso: Todos nos hemos estado quejando de que no tenemos tiempo para nosotros. La enseñanza de este periodo de enclaustramiento debe habernos permitido ver lo falso de esta queja; pues cuando ahora hemos tenido tiempo para nosotros y para nuestra familia, el problema era el aburrimiento o las discusiones.

Mi comentario:

Creo que aquí también hay un problema de desidia personal de cada uno que se ha acentuado al estar confinado con otra persona que está igual que tú. Afortunadamente no ha sido mi caso.

Con el día a día la gente no piensa en hobbies ni en distracciones diarias. A lo mejor este parón ha hecho que más de uno encuentre su hobby. Estos hobbies actúan como parones en el día a día para que la vida tanga más alicientes y no sea trabajar únicamente.

Yo no soy perfecta, pero durante estos días no me he aburrido en ningún momento. Me gusta mucho escribir en este blog además de leer y ver películas. Así que he llenado muy bien mis horas. Además, en casa tenemos un montón de juegos y junto a maridin hemos jugado algunas partidas de dardos memorables. Sencillos placeres de la vida.

Descubrir nuevas aficiones y retos personales: Todo cambio debe ser afianzado creando nuevos hábitos más positivos. En situaciones de crisis, nuestra obligación es replantearnos si nuestra vida, si nuestros objetivos, son coherentes con lo que hemos conseguido. Y sólo desde una visión integral y creativa podremos aprovechar esta oportunidad que nos ofrece la realidad: debemos ir más allá y plantearnos nuevas aficiones, nuevos retos, nuevas opciones, que nos permitan crecer como persona, como miembro de una familia, como profesional.

Mi comentario:

Creo que esto viene a decir lo que yo comentaba en el punto anterior sobre los hobbies, que no es otra cosa sino dedicarle tiempo a algo que te gusta. En mi caso, me he dado cuenta que lo que hago me encanta, a lo mejor no me da para vivir, pero me encanta. Así que debido a ello he encontrado una nueva afición y estoy muy sorprendida de ello. Como me gusta tanto escribir, durante estos días, he escrito mi primer relato y me he sentido tan bien que quiero seguir haciéndolo. Pronto sabréis más de mi nueva faceta

Hacer aquello que está bien y te hace sentir bien: La mejor manera de enfrentarse al miedo y la preocupación es dedicarse a hacer cosas gratificantes, aquellas que nos hacen disfrutar y sentirnos bien. Da igual que sean hobbies, ayudas a los demás o nuevas actividades que alguien nos descubre. Todo aquello que sea algo positivo, algo que nos haga crecer, es el momento de dedicarse a ello, pues nos hará sentir muy bien. Y también necesitamos desconectar de la realidad más dura, dedicándonos a otra realidad, aquella más gratificante para nosotros y para los que nos rodean.

Mi comentario:

Y este punto sigue ligado al anterior. En mi caso escribir es lo que me hace sentir bien y por eso me he lanzado. Busca en tu interior y, dentro de tu realidad, intenta hacer lo que te haga sentir bien. Pero que no sea por el confinamiento o por la desescalada que esto sea por ti y para ti.

Beber alcohol con sensatez. El aumento del consumo de alcohol como un medio para pasar el tiempo de aislamiento puede llegar a ser comprensible, pero después se debe volver a un consumo sensato del alcohol, tanto por la prevención de enfermedades como de la gestión psicológica de uno mismo.

Mi comentario:

¡Pues parece que se ha disparado el consumo de alcohol estos días! Creo que en nuestro caso también ha pasado, aunque eso sí con un poco de control. No mirábamos en los días de fiesta, pero en los laborables, nada de nada. Así conseguíamos no llegar a un descontrol También pienso que a lo mejor antes no se contabilizaban las visitas a los bares. No sé en otros países, pero aquí se queda para tomar una cervecita en el bar y si los bares no te venden la cervecita de turno te la compras y la bebes en casa, ¿no? Estoy segura de que cuando volvamos a rutina y volvamos a quedar para unas cervecitas con nuestros amigos otra vez en el bar, el consumo de alcohol volverá a bajar pues en el bar la cerveza cuesta más que en casa

Mantener la comunicación con familiares y amigos: Durante la cuarentena, las videollamadas de grupo aumentaron un 1000%, todo el mundo se apresuró a llamar a ese familiar o amigo con el que hacía tiempo que no hablaba. Hemos recuperado una comunicación fluida con muchos familiares y amigos, mantengámosla como un medio para sentirnos apoyados y poder apoyar a los demás.

Mi comentario:

Este fenómeno es el que más me ha impresionado y el que más me ha afectado. Con mis padres y familiares he seguido casi la misma rutina, bueno a lo mejor hemos aumentado algo aunque normalmente solemos hablar bastante a menudo. En cambio, sí que ha habido un gran aumento en la comunicación con los amigos.  Todos los días hemos tenido videollamadas y se ha convertido en una rutina diaria. Cosa que nos ha parecido una gran idea pues da la impresión de no estar tan solos en casa y de tener el apoyo de alguien que está pasando lo mismo que tú.

Espero que esta costumbre se quede para siempre.

Aceptarse a uno mismo, con sus virtudes y defectos: Este freno a la actividad profesional o académica se ha convertido en un momento de reflexión más o menos obligada sobre nuestros objetivos personales, familiares o profesionales. Es un buen momento para que de esa reflexión saquemos las mejores conclusiones, con un proceso mental de aceptación de nuestras virtudes y defectos, así como del planteamiento de aquellos cambios en nuestras ideas o conductas que mejoren no sólo la imagen que tenemos de nosotros mismos, sino de nuestra relación social, familiar o profesional.

Mi comentario:

Este es un tema que intento inculcar desde este blog: la aceptación de como eres.  Espero que estos días de recogimiento hayan servido a muchas personas a ver que son mucho mejores y más fuertes de lo que ellos se creen que son.

Este informe da algunas pautas más, pero esto se está haciendo muy largo así que, como os dije al principio, os dejo la infografía que la resume todas.

Espero sinceramente que todas estas ideas y mi forma de afrontarlas os den la clave para que la desescalada y la vuelta a la normalidad sea leve para tod@s y que pronto dejemos atrás esta pesadilla. Cuidaros mucho.