Hoy nos alejamos de la tierrina, y nos acercamos a la zona de Sierra de Francia, al sur de la provincia de Salamanca. Se trata de una preciosa comarca, montañosa y boscosa, en el que subsiste con gran arraigo tradiciones, cultural e historia. Os vamos a hablar de un par de restaurantes en dos de los principales pueblos de la zona; La Alberca y San Martin de Castañar.
Ambos pueblos desatacan por su cuidada arquitectura tradicional. La Alberca especialmente es un pueblo muy guapo, Monumento histórico-artístico desde 1940, muy cuidado y digno de visitar. En él además de dar un paseo por sus calles podemos disfrutar de su gastronomía, toda ella construida en torno a un animal; El cerdo ibérico. Tanto es así que en el mismo pueblo tiene erigido un monumento a dicho animal, símbolo sin duda de las gastronomía española.
En relación a este, hablaros de su conocido “marrano de San Antón”, tradición consistente en soltar un marrano ibérico por las calles de la Alberca todos los 13 de julio. Una vez suelto, el animal es alimentado por los propios vecinos y turistas del pueblo, campando a sus ancha por donde quiere, hasta el 17 de enero, momento en que es subastado para la matanza y donado el dinero a una ong.
En un pueblo en el que el olor a jamón se cruza contigo en cada esquina, nosotros optamos por comer en La Cantina de Elias, un local que podéis encontrar a la entrada de su calle principal. Dispone de una terraza muy agradable y en el interior de un par de comedores, así como de tienda de productos y vinos de la zona.
Las especialidades, como no, son las carnes, y así comimos. Como entrante unas croquetas de jamón ibérico, muy buenas, con un sabor riquísimo al jamón, y una ensalada de tomate, muy rica y abundante. De carne probamos, solomillo de cerdo ibérico muy rico, lechazo al horno rico también, chuletón de morucha, raza autóctona de salamanca, Cáceres y sur de Zamora, muy tierna y rica, y capricho de cerdo ibérico, corte que podemos encontrar junto a la carrillera. Muy rico todo, de gran calidad y cantidad.
De poster pude probar el flan de huevo, muy rico.
Para beber, además de agua, optamos por probar un vino de la zona, concretamente Viñas de Cambrico, un tinto ecológico, compuesto de uva Rufete (autóctona)y Tempranillo, bastante rico.
Todo esto junto con el vermú previo en terraza con tapa incluida por 104 €, para cuatro adulto y un niño, bastante bien. El servicio muy atento.
En la segunda localidad que visitamos, San Martín del Castañar, optamos por el restaurante El Mesón de San Martín. Este local solo dispone de un menú con varios primeros y segundos a escoger por el precio de 18 €, y menús infantiles por 10 €.
Os adjunto algunas fotos de primeros y segundos así como el pollo del menú infantil, pero os hablo de lo que yo comí, croquetas de jamón con boletus y abanico ibérico. Las primeras, estaban un poco machacadas, pero de sabor estaban correctas. El abanico es la parte que envuelve las costillas por el exterior. De sabor bien, pero no me pareció nada destacable.
De postre flan de cuajada, muy rico.
Para beber, agua y vino, un Ribera de Duero Viña Mayor de 2014, un poco flojo, sobretodo comparándolo con el Cambrico que tomamos previamente. Detalle de la casa es el entrante que te sirven, un vaso de gazpacho para combatir el calor.
Todo esto por 93,98 €, cuatro menús de adulto y uno infantil, con botella de vino. No me dio más comparando con la comida en La Alberca. El servicio muy atento
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