De Guindos ha hecho estas declaraciones, a preguntas de los periodistas, tras presentar junto al ministro de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente, Miguel Arias Cañete, las líneas estratégicas para la internacionalización del sector agroalimentario.
En cuanto a las líneas de apoyo para pymes, ha resaltado que en ellas se centrará parte del esfuerzo del Gobierno para fomentar y reactivar el tejido empresarial destruido por la crisis.
Ha recordado que, en los próximos días, se aprobará la ley de emprendedores, que recogerá medidas de impulso que se sumarán a las específicas para la internacionalización.
El Ejecutivo quiere facilitar el acceso a los mercados exteriores de las pymes porque, a su juicio, son las grandes empresas las que han concentrado tradicionalmente la labor exportadora.
Entre las medidas que estudia el Ejecutivo, a nivel general, figuran las dirigidas a la eliminación de trabas burocráticas y a "facilitar" su labor.
Según ha apuntado, las pymes asumen riesgos frente a los que tienen que recibir compensaciones en el ámbito fiscal, de la internacionalización y la eliminación de trabas a la actividad, "y por ahí irá la ley de emprendedores".
Desde el punto de vista de la financiación, ha apuntado que será prioritario para el Gobierno poner capital a disposición de las pymes en un contexto de problemas de "apalancamiento" y, en este sentido, ha recordado que inversores alemanes también inyectarán recursos a largo plazo en pequeñas y medianas empresas.
De Guindos ha asegurado que en el último trimestre del año "la economía estará estabilizada", tras corregirse problemas como el déficit público, el endeudamiento, el bancario y la pérdida de competitividad.