… de hacer limonada casera

Por Arusca @contrasypros

Es lo que más apetece en verano, una limonada bien fría que nos refresque bien. Habrá quien piense que mejor es la cerveza, pero ésa no la pueden tomar los niños ni la podéis hacer en casa . A mis Trastos mayores les encanta, especialmente al Mayor. Es una bebida súper fácil de hacer y para mí tiene muchas ventajas, pero vais a tener que esperar a los pros .

Empecé a hacer la limonada, con éste, hace tres veranos ya. Al principio, la familia de la segunda capa, es decir, la que no vive con nosotros en casa, me decía que para qué me metía en tal berenjenal, con lo fácil que era abrir un refresco o mejor un zumo. Una, que es cabezota especialmente para temas de cocina, hizo oídos sordos e hizo la limonada. Por aquel entonces, el Mediano era un bebé, así que el catador oficial fue el Mayor. Nada más probarla, le encantó y, en ese preciso instante, me vi haciendo la limonada muchos veranos más.

La verdad es que hace falta poca cosa. Para un litro de agua, más o menos, se necesitan entre dos y tres limones, según lo grandes o pequeños que éstos sean y vuestro gusto, por supuesto. Luego se añade azúcar (también al gusto), se remueve y, cuando se haya disuelto el azúcar, ya está lista para tomar. Respecto al agua, podéis echarla del grifo y luego enfriar la limonada en el frigorífico o podéis echarla en la jarra directamente fría. Si echáis el agua fría y queréis tomarla sin esperar, os aconsejo echar azúcar glass.

CONTRAS:

  1. Hay que exprimir limones. Pero éste es todo el trabajo que hay que hacer. Además, tened en cuenta que con poco zumo de limón os dará para un litro o quizás más. A mí me merece la pena.

  2. Al ser zumo de limón (recién) exprimido, lo normal es que haya pulpa de limón en la limonada, aunque se puede colar.

PROS:

  1. La limonada casera no deja de ser zumo de limón con agua. Por tanto es algo muy sano. Recordad que el limón es un cítrico, está cargado de vitamina C. Si en invierno tomamos zumo de naranja, ¿por qué no tomar en verano zumo de limón?

  2. Como la limonada la hago yo, sé exactamente qué lleva. Sin colorantes ni conservantes y controlando el azúcar.

  3. Los niños pueden participar en su elaboración exprimiendo los limones, añadiendo el agua, echando el azúcar… eso ya según su destreza.

  4. Se tarda poco en hacerla. Como ya he dicho, lo más costoso es exprimir los limones. Y ya. Si tenéis agua en el frigorífico, sólo tardaréis 5 minutitos en disfrutar de ella.

  5. Si queréis que se parezca más a los refrescos de limón comerciales, sólo hay que sustituir el agua normal por agua con gas.

  6. Si añadís cubitos de hielo con agua, es posible que se os agüe la limonada. Así que podéis hacer cubitos con limonada en vez de con agua. Por ejemplo, si un día la hacéis y os sobra, la echáis en la cubitera y, cuando volváis a hacerla, si necesitáis hielos, cogéis los hechos con la anterior limonada.

Si tenéis visita y queréis que os quede vistosa, añadirle a la limonada unas rodajitas de limón. Si tenéis en casa, también admite hojas de menta, que harán que sea aún más refrescante. En la de la foto, yo además añadí flores de lavanda. Era la primera vez que las echaba y, no sé si porque eran pocas, pero no se notaban en el paladar. Pero quedó bonito, ¿verdad?

Pues ahora os toca a vosotros. Un último consejo: si tenéis pensado hacer esta estupenda limonada casera, no escatiméis con los limones. Es posible que queráis repetir en cuanto la probéis .