Nótese la diferencia en visitas entre el video del Dr. Vic con menos de una hora de haberse estrenado, con el que alcanzó nuestra mesa en Verificiencia casi 24 horas después de haberlo subido.
Ayer por la noche participé en la mesa de análisis "El sueño del Espacio. Realidades, Fantasías y Engaños" organizada por el ingeniero y facebookfriend Javier Delgado, administrador del portal Verificiencia. La mesa (virtual) estuvo conformada por el profesor de arqueología Omar Espinosa, el físico Alexis Nathán Rueda, los investigadores escépticos de ovnis Leopoldo Zambrano Enríquez y César Buenrostro, y su humilde servidor, que no deja de sentirse honrado cada que lo invitan a participar junto a verdaderas lumbreras.
Cada uno de nosotros realizó una ponencia breve abordando puntos específicos para que las personas tuvieran la información adecuada sobre por qué Jaime Maussán no es confiable, no tiene ninguna reputación como investigador (así que es falso que tenga algo qué perder mostrando el fraude que mostró en la Cámara de diputados, para vergüenza de todo el país) y cuál es la historia detrás del fraude de las llamadas "momias tridáctilas" o "momias alienígenas de Nazca". El investigador y ciberfriend César Buenrostro hizo una presentación de los antecedentes históricos de los fraudes que usan momiar y cuerpos en general para venderlos como "seres de otro mundo"; el profesor Espinosa comentó sobre los fraudes pseudoarqueológicos y cómo es que los especialistas en el tema saben cuándo se enfrentan a uno; yo expuse sobre cómo el problema de fondo es el famoso problema de demarcación entre ciencia y pseudociencia, y cómo es que termina afectándonos a todos aunque algunos piensen que no es socialmente relevante; el físico Alexis Nathán expuso una interesante reflexión sobre por qué las personas creen lo que creen sobre vida extraterrestre; y finalmente, Leopoldo Zambrano hizo una ponencia magistral sobre cómo comenzó el fraude de las momias tridáctilas y cuáles son los detalles en las "pruebas" expuestas por Maussán y compañía que lo demuestran sin rastro de duda razonable.
Acto seguido, dedicamos unos minutos a comentar y responder preguntas del público. Aunque el plan original era que el evento durara una hora, lo cierto es que fue bastante divertido y estimulante, por lo que terminó alargándose de más. A pesar de eso, me quedé con muchas cosas por decir, especialmente de los comentarios del final. Mientras escribía esta entrada, el canal del Doctor Vic publicó una entrevista a Maussán que me ha decepcionado bastante, así que aprovechemos para contrastar su contenido y el que hicimos en Verificiencia.
Como ya es costumbre cada que hablo de videos de YouTube, primero les dejo el contenido que voy a comentar para aquellos que aún no lo han visto.
Primero, la mesa de análisis de Verificiencia:
Y ahora, la entrevista del Doctor Víctor Encina, mejor conocido como el Dr. Vic, a Jaime Maussán:
La mesa: ¿cortinas de humo y la ignorancia como fuente de la "secta" maussanita?
Como podrán notar en mi intervención, de un modo brillante no me di cuenta que no cambié la pantalla, así que más de la mitad de mis diapositivas ni se vieron (por aquí se pueden mirar); a parte, parece que mi lampara no me benefició nada, parece como si tuviera media cara paralizada y caída. El punto central de mi ponencia fue exactamente el mismo que expuse ya en este blog cuando comenté mi participación en Cosas de Sapiens: el problema de demarcación sí importa, no solo porque sea epistemológicamente relevante sino porque tiene consecuencias sociales y políticas que se sentir ver en esta clase de eventos. Las creencias irracionales, no me cansaré de repetirlo, tienen repercusiones negativas porque las personas eligen actuar basándose en éstas, hasta que ya es demasiado tarde y tienen el muro de la realidad en sus narices. Y darle legitimidad política, académica o mediática a la irracionalidad y sus vendedores no hace otra cosa que aumentarla en la sociedad, minando la propia autoridad y credibilidad política, académica y mediática.
Creo que lo dejé claro en mi comentario a aquel capítulo de Cosas de Sapiens y creo así lo hice también en mi participación en Verificiencia. Las ponencias de los otros participantes, en lo personal, me parecieron excelentes, y no tengo mayor comentario más allá de recomendarlas con insistencia, pues todos aportaron puntos valiosos para comprender por qué es necesario responder directamente las afirmaciones de los charlatanes, y cómo sabemos que estamos hablando de un descarado y criminal fraude.
Lo que me faltó comentar en la mesa fue, más que otra cosa, un par de precisiones a los comentarios que se esgrimieron: primero, en algún momento, mi ciberfriend César Buenrostro nos comenta que debemos estar alerta por una posible cortina de humo que se haya levantado con el evento maussanita del 12 de septiembre, ya que, seguramente, algo se quería ocultar. El tema siguió avanzando y no tuve la oportunidad de preguntarle a César exactamente a qué se refería, ya que el asunto de las "cortinas de humo" siempre deben matizarse para evitar caer en la conspiranoia. Esto ya lo he comentado en otras entradas, pero ni en mi época de magufo me he creído esa hipótesis de los fenómenos "inexplicables" (ovnis, chupacabras, mothman, crop circles, etc.) como presuntas cortinas de humo para que la gente no comente noticias de auténtica relevancia. Por más viral que haya sido la audiencia maussanita y sus monigotes tridáctilos, un evento como ese jamás haría que se ignoraran noticias relevantes de economía, seguridad, salud, ciencia o cualquier otro tema de importancia. Las personas que generalmente no se enteran de ese tipo de noticias no necesitan que les vendan ovnis o extraterrestres antiguos, ya que de todas maneras no iban a darle click al artículo que habla sobre crisis climática, cómo continúa la guerra en Ucrania o quiénes ganaron el Nobel de Física.
Esto no significa que no puedan darse "cortinas de humo locales", que en lugar de ocultar algo, lo disfrazan. Eso es justo lo que piensan muchos sobre la campaña del diputado Sergio Gutiérrez Luna, organizador de la audiencia ovni de Maussán, quien además está haciendo campaña electoral (para variar, antes que la ley lo permita) para la gobernatura de Veracruz por Morena. Gutiérrez Luna tiene un lamentable historial de llamar la atención en la Cámara de diputados con cascaritas de fútbol y eventos de ovnis, lo que no es muy "políticamente correcto" pero ha hecho que los medios y las redes sociales le presten atención. ¿Fue el evento maussanita parte de este show? No lo sabemos, aunque varios comentaristas afirman que sí, y si César Buenrostro se refería a esto, puede que no le falte razón.
Otros comentarios que acabaron en acuerdo entre Delgado, Zambrano y Buenrostro, señalaban que este es un ejemplo de cómo la gente cree por ignorancia, y que los seguidores de Maussán actúan casi de forma sectaria. Definitivamente, la ignorancia es una variable, pero dudo que sea la única en este caso, como tampoco lo es en otros de mayor urgencia, como los antivacunas, los negacionistas climáticos o las víctimas de pseudoterapias. Es cierto que Maussán y compañía están explotando la ignorancia de muchas personas, pero la gente no solo cree que los monigotes de Maussán pueden ser verdaderos por ignorancia. Como expliqué en mi análisis para Verificiencia (que seguro saldrá completo esta semana, aquí la primera parte), los promotores de las falsas momias alienígenas están haciendo un descarado acto de desinformación, usando argumentos pseudocientificistas, desprestigiando especialistas e instituciones, y lanzando retos falaces que confunden al público que en su vida había escuchado de algo como "patrimonio arqueológico". No solo es que las personas no saben, es que lo que les llega de información para, presuntamente, saber, es desinformación. Si agregamos a la fórmula el falso victimismo que Maussán ha estado usando (asegurando que está poniendo en riesgo su prestigio y que los científicos han sido prejuiciosos porque nunca han tenido los cuerpos "no humanos" en sus manos) y la gastada e inmoral táctica de la mayoría de los medios de poner en igualdad charlatanes (como Maussán y sus compinches) y especialistas en el tema, tenemos la fórmula para la perpetuación del embuste asegurado.
Sé que Leopoldo Zambrano y César Buenrostro hablan por experiencia cuando se refieren a los seguidores de Maussán como una secta. Es bien sabido que la actitud del propio Maussán ante los críticos es la del típico troll que no hace otra cosa que envenenar el intercambio, misma táctica que desde siempre han usado sus colaboradores en cada programa que realizan junto a su jefe. También sabemos que Maussán ha facturado millones con este fraude, como lo ha hecho antes con otros embustes y tergiversaciones de casos ya resueltos. Actualmente, no solo maneja su canal Maussan TV por YouTube, sino que tiene series completas en la plataforma magufa Gaia y en el canal de pseudohistoria más famoso, History. Es esperable que, como empresario, tenga varios trabajadores (y por "trabajadores", hablo de trolls) que ayuden a esa imagen que muchos extranjeros tienen de él, como un respetado periodista e investigador querido por todos los mexicanos. Pero fuera de ese grupito, que debe ser relativamente pequeño, existe un mar de personas convencidas de los casos que presenta, víctimas de la fórmula (más o menos) descrita el párrafo anterior.
Es a esas personas, y al público en general, a los que se debe llegar. En mi ponencia hablé brevemente sobre intentar abrir diálogos con verdaderos creyentes, a quienes no solo deberíamos exponerles datos y nombrarles falacias, sino que deberíamos escuchar con atención para saber por qué han llegado a creer en lo que creen, y qué clase de prueba estarían dispuestos a aceptar para cambiar de opinión o, al menos, replantearse su creencia. Como magufos reformados, Leopoldo, César y yo, sabemos que no es imposible cambiar. También sabemos que ser parte del "bando creyente" puede darle seguridad a quienes se miran dentro de éste, e incluso puede que la creencia ovni sea parte de su identidad personal. Eso significa que no solo nos hará falta correcta información, sino la comprensión de por qué es la información correcta y por qué no necesariamente debería ser un golpe a su identidad saber la verdad.
Por la actitud de muchos escépticos "profesionales" y divulgadores científicos, sé bien que esta no es una opinión popular, pero es necesario que dejemos de ver a los magufos como una minoría irrelevante a la que no se le debe prestar atención. ¡Fue por esas "minorías irrelevantes" que tenemos tantos problemas a la hora de hablar de la confianza en las vacunas, la realidad de emergencias mundiales (cambio climático y pandemia COVID-19) y a ufolocos presentándose en Congresos de EEUU y México! Alguien tiene que prestar atención también a ese sector de la población, que no dejan de ser víctimas del embuste y la desinformación.
Mi decepción con el Doctor Vic
Bueno, creo que eso era todo sobre la mesa de Verificiencia. Y como les comentaba al principio, mientras escribía esta entrada me salió en YouTube el anuncio de una entrevista a Jaime Maussán en el canal del Doctor Vic. Antes que se estrenara el video, dejé este comentario (el primero de todos los comentarios del video, en realidad) de advertencia:
Como si me hubiera convertido en Nostradamus, el video fue exactamente lo que pensé que sería: otro espacio más donde le dieron rienda suelta a Maussán, repitiendo las mismas incoherencias de siempre para defender lo indefendible, y como si se tratara de un reportero mediocre al estilo Televisa o TV Azteca, el Doctor Vic siguiéndole el juego sin cuestionarlo realmente.
El Doctor Vic se había ganado mis respetos por su video contra los covidiotas en tiempos de pandemia, así como sus reacciones a Dr. House. Debo admitir que me había parecido muy tibio a la hora de cuestionar la quiropráctica o su tambaleante escepticismo sobre historias de fantasmas en el hospital, pero por los antecedentes que ya mencioné, lo mantuve como una fuente relativamente confiable y su canal como uno más de divulgación de la medicina a considerar.
Además de mi decepción, debo admitir que me dio tristeza mirar cómo en 10 minutos su entrevista tenía casi el triple de visitas que la mesa de Verificiencia en la que participé menos de 24 horas antes. No es como que me sorprendiera, pues su canal tiene más de 2 millones de suscriptores, mientras que Verificiencia apenas está empezando a meterse en redes más allá de facebook y su portal oficial. No fue tanto el número de vistas en tan corto tiempo, sino el mirar que otro canal considerado "confiable" por millones de personas usaba su espacio para promover a este charlatán descarado.
Algunos comentarios en el video me regresaron la esperanza en que el público no se deja embaucar tan fácil por las afirmaciones refutadas una y otra vez de Maussán, aunque hay otros que sí dejan mucho qué desear:
De momento, no puedo sentir otra cosa más que una profunda decepción al ver que un canal que se supone es de "divulgación" se preste para hacer más grande un circo decadente y vergonzoso. De verdad espero que el Doctor Vic pronto saque un nuevo video explicando las mentiras de Maussán, los evidentes sinsentidos anatómicos y biológicos de las "momias" que exponen un fraude bastante obvio para un especialista en el cuerpo humano como él, y que de una vez pida una disculpa a quienes lo seguimos por las burradas que dijo junto a Maussán y por haber presentado un video tan irresponsable como este.
De corazón, espero estar actualizando esta entrada con todos esos elementos, que no son otra cosa que lo básico que debería hacer un profesional de la salud y divulgador científico honesto.
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* Extraterrestres ante el Congreso mexicano. Pruebas insuficientes, argumentos falaces y una importante lección social, parte I, artículo de mi autoría en Verificiencia.