De la teta al plato

Publicado el 16 mayo 2014 por Nutricionesencial
Con este post inauguramos una nueva sección en el blog: bebés y niños. He dado muchas vueltas a los contenidos que publicar. Inicialmente, pensaba compartir aspectos de crianza y cuidado natural del bebé... pero últimamente siento que esto se va del tema del blog, creo que si es un blog de alimentación puede haber mucha gente a la que no le interese leer que pañales usa mi hijo o si le llevamos en fular.
De momento nos vamos a centrar en la alimentación infantil. Seguramente también hablaré algo sobre lactancia materna, un tema que me apasiona, y que al fin y al cabo, es nutrición.

Amamantando en la Provenza


"¿Qué come tu bebé?".Esta es una pregunta que nos hacen a menudo. La gente se refiere a si es vegano o no. Pero antes de responder a esta cuestión, comparto lo que dice la Organización Mundial de la Salud (OMS) sobre la alimentación infantil:
"La lactancia materna es la forma ideal de aportar a los niños pequeños los nutrientes que necesitan para un crecimiento y desarrollo saludables. Prácticamente todas las mujeres pueden amamantar, siempre que dispongan de buena información y del apoyo de su familia y del sistema de atención de salud".

"La OMS recomienda el calostro (la leche amarillenta y espesa que se produce al final del embarazo) como el alimento perfecto para el recién nacido, y su administración debe comenzar en la primera hora de vida. Se recomienda la lactancia exclusivamente materna durante los primeros 6 meses de vida. Después debe complementarse con otros alimentos hasta los dos años".

Ya os conté aquí un poquito sobre lactancia y mi experiencia los primeros meses. A día de hoy, nuestro pequeño tiene 8 meses y sigue tomando pecho cuando lo necesita.

De picnic


En la visita de los 6 meses, nuestra pediatra Teresa, nos indicó que ya podíamos empezar a introducir alimentos sólidos en la dieta de Antu.
Hacía meses que Iván y yo hablábamos de los ricos platos que le haríamos a nuestro hijo, y de lo que disfrutaríamos los 3 compartiendo mesa... pero en ese momento no me sentí contenta en absoluto.
Escuchar a Teresa hablar sobre la alimentación complementaria, me removió mucho por dentro, sentía que la relación con mi hijo cambiaba de manera cualitativa, y aunque lo creyera, no estaba preparada emocionalmente para ello. Mi hijo crecía y ya no dependía exclusivamente de mamá para comer. Tras unos días viviendo mi duelo, y viendo que Antu no había logrado aún la postura de sentarse, ni mostraba interés por la comida, pues decidimos que seguiríamos con la teta hasta que él tomara la iniciativa.
Y no se hizo de rogar. Unas semanas más tarde, mientras le tenía en brazos, me arrebató una zanahoria de la mano y empezó a chupetearla con curiosidad. Para mi fue la señal de que ahora si podíamos empezar a presentarle otros alimentos.

Descubriendo nuevas texturas


¿Qué alimentos?. Desde que te quedas embarazada tienes que tomar decisiones que te afectan tanto a tí como a tu hijo, y cuando nace ocurre igual. Todos los padres deciden por sus hijos hasta que ellos tienen la capacidad de hacerlo por si mismos. Todos los padres eligen para sus hijos lo que según su criterio es lo mejor para su crecimiento físico, emocional y mental.
Para nosotros, siendo coherentes con nuestra visión de la vida, es ofrecerle una alimentación 100% vegetariana.
Durante el primer año se recomienda ofrecer el pecho al bebé( o sucedáneo de leche materna, si se ha escogido alimentarle así), y después la alimentación complementaria (AC). Porque la AC no sustituye tomas de leche, sino que las completa si el bebé lo necesita. Si introducimos la AC al revés (primero ofreciendo los sólidos y después leche) es probable que el bebé se destete de manera precoz.

En la trona...


Ya llevamos un par de meses ofreciendo a Antu frutas, verduras, cereales...sin prisa, disfrutando el proceso mucho, y permitiendo que sea él quien regula lo que come. Queremos que tenga una relación sana con la comida, sin enfados, juegos o engaños por nuestra parte para que coma.Siendo conscientes de que estamos sentando unas bases fundamentales en su vida, y por ello tratamos de hacerlo con todo nuestro amor.
Cada día nos sorprende en la mesa. Al principio comía en mi regazo, y desde los 7 meses que es capaz de sentarse por sí mismo, lo hace en su trona. Muestra curiosidad por la comida, experimenta y siento que disfruta el momento de sentarnos a la mesa.
Me siento agradecida por todos los aprendizajes que me trae la maternidad, mi mejor oportunidad de autoconocimiento personal.

"La lactancia es sólo el comienzo de una gran historia de amor"