Hay un pasaje del manga La chica a la orilla del mar (Umibe no onnanoko) de Inio Asano, en el que la chica protagonista dice: Me gustaba caminar por la arena buscando cualquier cosa. Restos de fuegos artificiales, algas, algún sombrero que el viento arrastró hacia allí… Casi nunca se encuentra lo que se busca. En mi caso, quizás, es que nunca esperé encontrar nada en absoluto.
Quizás le pasó como a ella. Quizás nunca esperó encontrar nada en absoluto (pero no lo sabía) tal vez, siempre supo que no encontraría nada, pero no lo sabía ver. En el fondo siempre supo que encontraría algas, o quizás, es que en realidad ella sí que encontró algo de valor a la orilla del mar. Sintió pena, porque tal vez a ella la confundieron con restos de fuegos artificiales, también, a la orilla del mar. Pobre niña, es tan débil y pequeña… Es tan ingenua…! Cree que es valiente: Pero no lo es, valiente fue su estupidez. Pobre niña estúpida.