Previamente a este partido, Nikolay Davydenko había superado a Eduardo Schwank por 4-6, 6-3, 6-1 y 6-4, lo que había provocado el empate de la eliminatoria en Moscú. Aunque el “Rey David” apareció con todo su esplendor, provocó la paridad en el historial entre ambas naciones y la caída rusa como local tras 23 duelos sin conocer la derrota en su propio reducto (desde 1995, cuando perdió en la final contra Estados Unidos).
Antes de regresar a la actividad profesional, Nalbandian había manifestado que "si tuviera continuidad, por las lesiones que tuve, podría estar en el top ten mundial. Pero necesito la competencia".
Con el 3-2 a favor de la Argentina, el cordobés (invicto este año y con record de 20-4 en singles en esta competencia) se aseguró una nueva posibilidad de seguir escribiendo su historia copera y la de nuestro país, entre el 17 y 19 de septiembre frente a Francia y como visitante.
Crédito de la foto: AFP