… de pintar camisetas

Por Arusca @contrasypros

No hay nada más original que una camiseta pintada por uno mismo. A los niños les encanta pintar, pero siempre pintan en papel o similares. Siempre andamos con el “¡cuidado no te manches la ropa!”. Así que imaginaos lo que les encanta pintarse sus propias camisetas. ¡Éxito asegurado! Y, además, se pasa un ratito divertido. Es algo caótico, no os engañaré, pero merece la pena.

Yo me fui a Decathlón a comprar camisetas, de colores lisos, baratitas. Las pinturas para pintarlas tienen que ser especiales para telas. Yo di con ellas en Amazon. Tapé bien la mesa de trabajo y les puse para la ocasión ropa vieja o, si lo hacéis en verano como nosotros, incluso sin ropa :D

Lo gracioso de esta manualidad es utilizar el color de la camiseta para poner el dibujo elegido. Por ejemplo, las camisetas azules se prestan muy bien para dibujos del fondo del mar. Las blancas son el comodín, donde todo cabe. Hay que pensar bien qué vamos a dibujar. Los niños pueden pintar lo que les apetezca, en plan abstracto, o un dibujo en concreto. Pueden usar sólo el pincel o los rotuladores o usar sus manos y pies para crear dibujos más divertidos. Eso ya depende del artista y de la paciencia de la madre ;)

Yo me lié la manta a la cabeza un día que no apetecía mucho ir a la piscina y saqué todo lo necesario. Pronto se olvidaron de que esa tarde no habría chapuzón. El Mayor optó por dibujos concretos: un pompero con sus pompas, un volcán en plena erupción… El Mediano tiró también por ahí (un pulpo, varias caras happy, como dice él), pero al final le salieron composiciones más abstractas. Al Peque le ayudé yo: le di una camiseta y un pincel y ahí fue haciendo lo que podía. Pero luego cogí otra y fui poniendo los números, según él me los iba diciendo. Finalmente, hicimos una con sus huellas de las manos en varios colores. ¡Cómo disfrutó con ésta última!

No sé si venderán también estas camisetas para adultos, pero ya les he dicho que en la próxima tanda tienen que hacerme una a mí. Porque ya os digo que habrá próxima vez, probablemente con camisetas de manga larga para el invierno :)

CONTRAS:

  1. Hay que tener cuidado al pintar las camisetas para que lo que se pinte por delante no cale a la parte de atrás. Para evitarlo, lo mejor es poner un cartón dentro de la camiseta mientras se estén pintando.

  2. Pintar tela no es como pintar en papel, cuesta un poco de trabajo.

  3. Hay que dejarlas secar, la pintura tardará como un día. Esto es importante tanto si se van a hacer más detalles en la camiseta como si ya está terminada.

  4. Después lo mejor es plancharlas, poniendo un paño u otra tela entre la plancha y la camiseta. Así la pintura se adhiere mejor a la camiseta. Yo ya tenía las camisetas lavadas de antes, así que tras el planchado se las pusieron directamente. Tengo la manía de lavar la ropa antes del primer uso, jejeje…

  5. Si se manchan de comida o de una caída, lo mejor es lavarlas a mano para frotar justo donde esté la mancha. A ser posible, lo más rápidamente que se pueda. De lo contrario, corremos el riesgo de que o no salga la mancha o de que, al intentar quitarla, nos llevemos también parte del dibujo.

PROS:

  1. No os puedo describir lo orgullosos que van mis hijos cada vez que se ponen sus camisetas. Son su obra de arte y se la pueden poner. ¡No hay ninguna igual en todo el mundo mundial!

  2. ¿Recordáis que en la entrada sobre heredar ropa os conté que estaba guardando las camisetas que tenían algún valor sentimental para hacerles una colcha cuando yo aprendiera a coser y dársela cuando fueran mayores? Pues, como os imaginaréis, estas camisetas irán directamente a esa manta.

  3. En una tarde, entre los tres (cuatro si me cuento yo) pintaron unas ocho camisetas. Y aún nos sobró bastante pintura. Un solo bote cunde muchísimo.

  4. Se pueden mezclar colores para obtener otros y así descubrir la magia de los colores ;)

  5. Es una actividad que fomenta la creatividad.

Aquí os dejo una muestra del resultado final, cada uno con su propia camiseta pintada por él mismo: el Mayor con su pompero y sus pompas, el Peque con sus manitas de colores y el Mediano… esto… con su pulpo, jejejeje… ¿Os animáis a hacerlas? ¡Los peques van a disfrutar muchísimo!