Tenía claro que para el dorado recurriría a la fabulosa Color Tattoo de Maybelline en este tono. Es un dorado cálido que pigmenta llamativamente y su duración, pese a ser una sombra en crema, es buena también, sobre todo si la fijamos con un tono similar en polvo: yo usé la 01 mono de Bourjois.
El otro punto fuerte del look son los tonos corales cálidos. Para lograr tonos similares mezclé un labial anaranjado de Sephora con un gloss de Rimmel. El rubor es de Golden Rose y el rostro va contorneado con el magnífico trío de Isadora.
En definitiva, no es un look discreto, pero tampoco tan recargado como si fuera un calco de la foto. Yo me siento cómoda y favorecida con él.
Ahora...juzguen ustedes ;)
BESOS!!