«De quien lee, puede esperarse algo»

Publicado el 23 abril 2015 por Rosa Valle @RosaMValle

A salto de mata, araño unos minutos para esta entrada que no estaba prevista. No se queda la terapeuta a gusto consigo misma sin regalarle unas letritas de palo al Día del Libro, una cita de esas que están cerca del corazoncito. Sí, vale, ya sé que este día no debería de celebrarse y bla bla bla, como el resto de días-internacionales-de. Pero ahí está y si este día los libreros venden más, pues me alegro, y si este día nos regalan una flor y un libro, pues mira tú qué bien y si este día alguna voz autorizada y edificante dice algo que sume en las cuentas lectoras y la cultura de este país, pues mira tú qué bien.

Ciertamente ;-)

Reflexionaba en el coche camino de la oficina -saben de qué les hablo, ese momento del día en que la cabeza está al cien por cien, loca de energía y pletórica de listas de actividades varias: un poema de coordinadora- que un bonito objetivo para lograr una población amante de la lectura es que nunca nadie tenga que pedir perdón por lo que lee (saco de la bolsa a Belén Esteban y semejantes…. estarán Uds. conmigo). Que para cada lector hay un libro. Porque los gustos lectores no son más que gustos y cada cual, por fortuna e imperativo de la diversidad, tiene los suyos.

Estoy convencida de que quien no lee no es que no le guste leer, sino que aún no ha descubierto cuáles son sus lecturas.

Educación si, pero no solo

Como en todo, la educación y el ejemplo en casa es fundamental en esta afición que va más allá del ocio. Fundamental pero no imprescindible, hablo por experiencia, que a una en su casa la reñian por leer. Recuerdo esconder el libro entre las sábanas cuando mi padre de niña venía a darme el beso de buenas noches. Con la mejor de las intenciones, él solo quería que su hija estudiase (esa formación a la que él, por su humilde condición, no tuvo acceso) y se le antojaba al buen hombre que dedicar tiempo a los libros de ficción era perder el tiempo. Me alegro de no haberle hecho caso, porque sí, a los padres a veces hay que desobedecerles (menos mal que mis ñajas no siguen este blog :-)

Diversidad, bendita biblioteca

Hay lectores de biografías, de temas deportivos, de ensayo, de novela negra, de novela social, de poesía urbana, de teatro costumbrista, de libros de autoayuda… Bendita la diversidad del universo lector.

Con la industria editorial y librera, con los autores

En este día, nos acordamos también de quienes, con gran esfuerzo, viven del libro. Esos libreros, editores, agentes y escritores que viven, o tratan de vivir, de una profesión que, a buen seguro, es vocación, devoción , pasión en todos ellos. Batallan con tiempos pachuchos, pero no sueltan la espalda. Que sientan nuestro calor.

Feliz Día del Libro, lectores, iniciados y sibaritas, a sorbitos o devoradores, sin estudios o eruditos, con chupete y con bastón, a los que estamos y a los que están por venir. Con un libro entre las manos hay esperanza. Lo que dice mi madre del buen comedor, lo extrapolo a la lectura:  «De quien lee, puede esperarse algo».

#DíadelLibro