De turismo por Barcelona: la Barcelona romana

Si hay una ruta bonita que no puedes perderte si estás de turismo por Barcelona, esta es la ruta romana, a parte de la ruta del modernismo. A continuación os dejo el top 5 de los monumentos de la Barcelona romana. ¡No te los pierdas!

1. Templo de Barcino: templo dedicado al emperador Augusto, fundador de Barcino. De este templo sol oquedan cuatro columnas corintias impresionantes ubicadas sobre un podio. Los restos se encuentra en un edificio renacentista en la calle Paradis, una calle pequeña escondida detrás de la Catedral. Este edificio fue construido pocos años después de la fundación de la ciudad hacia principios del siglo I d. C. Era un edificio de planta rectangular sobre un pódium, hexástilo y períptero. Puedes ver más información en la Barcleona romana en Wikipedia.
2. Plaza Nova: la plaça Nova de Barcelona tiene sus orígenes en 1358, eṕoca en la que los ciudadanos de Barcelona ya podían contemplar una de las cuatro puertas de entrada a la ciudad romana que iba, Cardus arriba, hacia el Forum. Dos torres de planta circular franquean la puerta que nos introduce al corazón del Barri Gòtic. Actualmente se puede ver parte de la muralla y dos torres cuyo origen se remonta a los siglos I a.C y IV d.C.
3. La Plaza del Rey: en esta plaza se encuentra el Museo de Historia de la Ciudad (MUHBA), el cual conserva en su sótano los restos más importantes de la Barcino romana. La entrada cuesta 7 euros, pero merece la pena. Además, la Plaza del Rey es una de las más famosas y con más ambiente de la ciudad, también con us propia historia.
4. Plaza de Ramon Berenguer el Gran: en esta plaza se encuentran los restos más importantes de las paredes de la defensa romana y de las torres cuadradas, sin duda una de mis plaza favoritas de la ciudad. Desde la Vía Laietana de Barcelona, detrás de la escultura ecuestre, encontramos un lienzo de muralla romana espectacular con la capilla gótica de Santa Ágata por detrás.

5. Necrópolis romana: se encontraron varios conjuntos de tumbas o necrópolis en el exterior de la muralla, tal como era costumbre en la época. La necrópolis más importante tiene más de 70 tumbas de los siglos II y III. En la Plaza de la Villa de Madrid se encuentran los restos de algunas tumbas dispuestas a ambos lados de una vía sepulcral romana. Las tumbas fueron descubiertas casualmente en 1954.