En 325 aparece entre los firmantes del Concilio de Nicea. En 361, Juliano el Apostata asumió en solitario el gobierno del Imperio y pretendió volver al paganismo oficial, sumiendo a los cristianos en cierta persecución. Doroteo tuvo que volver a exiliarse a Sicilia, siendo muy anciano. En este viaje sufrió muchas privaciones en el mar y en tierra, muriendo al año siguiente, 362, con 107 años de edad. Por tantos sufrimientos en ocasiones se le llama mártir.
Fuentes:
A 5 de junio además se celebra a:
San Bonifacio de Fulda,
obispo y mártir.
San Fernando de
Portugal, príncipe.
Beato Meinwerk de
Paderborn, obispo.