El exilio, es curiosa la historia, nos trajo hasta esta villa a dos personas, un ruso y un mejicano, que de una manera u otra plasmaron en su obra la visita, creo que radicalmente opuestas sus ideas políticas pues uno, el ruso, luchó con el Ejército Blanco, prozaristas que se enfrentaron a las fuerzas comunistas que surgieron con la revolución rusa; y el otro, el mejicano, muy joven se alistó voluntario en las fuerzas de Pancho Villa. Uno, el ruso, nos dejaría pintadas una serie de preciosas láminas y el otro, el mejicano, aunque no las conoció pues su visita fue anterior, bien les pega la frase que escribió sobre el pueblo en sus "Crónicas de mi Destierro":
"...Luego, bajo un claro lunar indescriptible, Torrelaguna cobra, mientras la recorremos, la fisonomía fantástica de una ciudad que se desmorona, que se desgrana de modo inexplicable al lado de su río...Su antiguo vigor medieval parece seguir liquidándose después de una bancarrota prolongada durante siglos..."
Son MIGUEL OURVANTZOFF y MARTIN LUIS GUZMÁN, no hace falta decir cual es el ruso y cual el mejicano.