Desde el año 1961 y hasta 2008 (47 años), el mando militar norteamericano no publicó ningún “manual” destinado específicamente a la Guerra No Convencional, siendo el Manual de Campo FM 31-21 Guerra de Guerrilla y Fuerzas de Operaciones Especiales –de 1961–, el último de que se tenga conocimiento, hasta la publicación en septiembre de 2008 del Manual de Campaña FM 3-05.130 La Guerra No Convencional para las Fuerzas de Operaciones Especiales del Ejército.
Luego, en plazo tan breve como entre septiembre de 2008 y noviembre de 2010, el Departamento de Defensa actualizó su base doctrinal sobre la Guerra No Convencional en, al menos, tres documentos: el ya citado FM 3-05.130; el Manual del Jefe para la Guerra No Convencional, de noviembre de 2009 (Aunque no se trata de un documento doctrinal, ha sido avalado por el Centro y Escuela de Guerra Especial de las Fuerzas de Operaciones Especiales de EE.UU. como un recurso que sirve para introducir a los nuevos efectivos de Operaciones Especiales en el concepto, las tácticas y la técnica de la Guerra No Convencional); y la Circular de Entrenamiento 18-01 Guerra No Convencional, destinada igualmente a las Fuerzas de Operaciones Especiales del Ejército.
No es, para nada, coincidencia que estos materiales –y otros que de manera secreta hayan sido emitidos–, vieran la luz en el preámbulo de la llamada Primavera Árabe y previo al que puede considerarse el primer escenario de Guerra No Convencional exitoso de este siglo: la guerra de Libia.
Resulta evidente que quienes promovieron y “lideraron desde la retaguardia” tales conflictos, tenían frescos los conocimientos y en sus maletas llevaban, para consulta, libros y materiales actualizados sobre la Guerra No Convencional, que aun preservaban olor a imprenta.
Pero la actualización del cuerpo doctrinal sobre la Guerra No Convencional no concluyó en 2010.
En correspondencia con las proyecciones estratégicas de Washington a largo plazo –definidas en documentos como la Revisión Cuadrienal de Defensa y en los discursos recientes de importantes funcionarios del Gobierno estadounidense–, que descartan de manera tácita la reiteración de experiencias bélicas básicamente convencionales, como las de Irak y Afganistán, es notoria la aparición de nuevos materiales doctrinales y de entrenamiento, que hacen las veces de “herramientas renovadas” con las experiencias extraídas de escenarios de Guerra No Convencional recientes y aún en curso.
Así, en septiembre de 2013 fue emitida la Publicación Técnica del Ejército (ATP, por sus siglas en inglés) 3-05.1 Guerra No Convencional, definida por la revista Special Warfare como “fundamento doctrinal del Ejército de EE.UU. para el desarrollo de la Guerra No Convencional” y el “más abarcador documento del gobierno de EE.UU. sobre esta materia”.
Al igual que varios de sus predecesores, a pesar de estar destinado al ejército, el texto está deliberadamente diseñado para ser empleado por el resto de los servicios armados, así como otras agencias gubernamentales, multinacionales y líderes políticos, mancomunados en el esfuerzo “multifactorial” y no únicamente militar que implica una campaña de Guerra No Convencional.
La ATP 3-05.1 establece desde sus primeras líneas que no reemplaza a la ya conocida Circular de Entrenamiento 18-01, pero excede a esta en cuanto a su alcance y destinatarios, especialmente por el énfasis que coloca en la Guerra No Convencional como “opción política de utilidad estratégica y operacional” por lo cual se considera un documento “disponible para la toma de decisiones de interés nacional para los Estados Unidos”.
Sin embargo, a pesar de su pretendido alcance y contenido, la ATP 3-05.1 parece ser aún insuficiente. Ello se deriva de la necesidad enunciada por la Junta de Jefes de Estado Mayor de contar con una Publicación Conjunta (JP, por sus siglas en inglés) destinada especialmente a la Guerra No Convencional, por ser esta el único de los llamados “cinco pilares” de la guerra irregular que no cuenta con este tipo de documento, que aúna y regula los esfuerzos de varios servicios armados en el contexto de una operación militar.
El texto, designado por el momento como JP 3-ZZ, debe estar listo para el último trimestre de 2014 y su elaboración fue asignada, de forma conjunta, a la Escuela y Centro de Guerra Especial del Ejército John F. Kennedy –la misma que se atribuye la autoría de la Circular de Entrenamiento 18-01– y al Comando de Operaciones Especiales.
Aunque no se conoce todavía la estructura y contenido exacto del documento, su mera elaboración constituye un impulso en la conformación del cuerpo doctrinal destinado a la Guerra No Convencional y evidencia la necesidad del Departamento de Defensa de EE.UU. de contar con una doctrina conjunta que agrupe las formas en que cada servicio actúa en el contexto de la Guerra No Convencional, sobre todo para poder operar de forma integrada, con componentes (armados y no armados) no habituados a intervenir en este tipo de operaciones.
Como antecedente a este esfuerzo, destaca el Concepto de Integración Conjunta de la Guerra No Convencional, documento “secreto” elaborado en febrero de 2010, que según lo revelado “aquí y allá” se dice recomienda mejorar las tácticas, técnicas y procedimientos para realizar y apoyar la Guerra No Convencional en ambientes urbanos y con el empleo de ciber-herramientas.
Quizás secreto porque durante décadas estos procedimientos se consideraron exclusivos de las Fuerzas de Operaciones Especiales. Ello evidentemente está cambiando y ahora Estados Unidos se apresura en preparar a todos los componentes de sus fuerzas armadas –y más allá– para participar de forma conjunta en un esfuerzo de Guerra No Convencional en cualquier latitud del planeta.
En ese contexto, las propias Fuerzas de Operaciones Especiales continúan perfeccionando su cuerpo doctrinal. En tal sentido destaca la próxima publicación del Manual de controladores/observadores para la Guerra No Convencional (designada SWCS Pub 14-01) cuyo objetivo esencial es proveer, según la ya citada revista Special Warfare del Comando de Operaciones Especiales, de una “lista más detallada de las tareas que, en el marco de este tipo de conflictos, desarrollan los componentes de operaciones especiales”. Se aprecia que este manual se publique, igualmente, en lo que resta de 2014.
Más allá del volumen o el contenido específico de dichas publicaciones, su sola divulgación constituye una clara evidencia de que el estamento político-militar norteamericano continúa preparándose para un escenario futuro donde la Guerra No Convencional sobresaldrá entre los procedimientos de elección para agredir naciones soberanas.
Los cubanos estamos alertas. Sabemos que preparan “sus libros” en respuesta a un plan de alcance global que nos incluye.
José Martí, cuya sangre fertilizó el suelo sagrado de la Patria hace por estos días 119 años, nos enseñó lo que hay que hacer cuando el enemigo se ufana en tanta teoría: “Plan contra plan; sin plan de resistencia no se puede vencer un plan de ataque”.
Tenga tranquilidad el Maestro: ¡tenemos un plan!
Tomado de Cuba Defensa. Articulo de David Ignacio Martí