Cargada de noticias que dar, con un par de novedades entre manos babeadas a más no poder (una ya medio devorada, diré que… “¡¡omae!!”), acabo de aterrizar en lands Barcelonesas.
Un adelanto (me tomo un día de descanso para recuperarme de las pateadas por la capital) y en breve os cuento qué tal fue todo y mi experiencia por allí.
Simplemente dar las gracias a Inés de nuevo (una no tiene el privilegio de alojarse con una escritora todos los días… ¿qué? pues claro… ¿no conocéis El jardín de atrás?): por su hospitalidad, su paciencia y esas risas que casi nos hacen perder el último autobús, por su visita guiada y por ser tan geniales todos: ella, su familia y Pablo –wthf***, your the craziest, man!!!-
A Alba, por darme tal bienvenida y acompañarme durante toda la Blog Experience SM. Es tan elegante como su blog transmite, es tal cual se la lee, y si da gusto leerla todavía es mejor escucharla, fue un encanto y le agradezco de todo corazón que fuera mi acompañante el jueves (por cierto, un diez para tu sentido de la orientación aunque no lo admitas). Un auténtico placer, sin más.
Y sobretodo gracias a SM por organizar TODO (y en mayúscula porque no imagináis todo lo que hubo) y darme la oportunidad de participar. Se portaron fantásticamente bien con nosotros, nos llenaron las manos de regalos y los oídos de anécdotas y datos curiosos sobre su trabajo, y un montón de profesionales se presentaron y charlaron con todos haciendo más cercana y personal la relación blog-editorial. Todo un lujo, para qué negarlo.
Una decisión de última hora más que acertada.