De Zamora a Gijón, por el Puerto de San Isidro

Por Jmbigas @jmbigas
Amanecí ese viernes de finales de Agosto en un hotel del centro de Zamora, junto a la calle Santa Clara y al Parque de la Marina Española. Bueno, a ver, no estoy sugiriendo ningún tipo de abducción ni nada parecido: amanecí ahí porque ahí me había acostado la víspera, que quede claro.

Cigüeñas sobre la Catedral de Zamora
(JMBigas, Agosto 2011)

Ese día tenía previsto viajar hasta Gijón, donde tenía ya reservado un hotel para las dos noches siguientes. Bueno, a ver, que lo que había reservado era una habitación, no el hotel entero, que quede claro.Tenía varias etapas previstas para ese día. La primera era el desayuno y la prensa. En los periódicos locales, (como El Adelanto de Zamora), una de las noticias del día era la licitación, por parte del Ministerio de Fomento, de los 49 km de autovía entre Zamora y Benavente, completando así la llamada Autovía de la Plata (A-66). La prensa reflejaba la sorpresa de que una obra cuya construcción está valorada en 267MEuros saliera a licitación por un total de 1.356MEuros. La explicación es que la fórmula escogida (dada la problemática situación de las Arcas del Estado) es la de colaboración público-privada. No se licita únicamente la construcción sino que, además, se incluye la explotación y conservación durante el plazo de 30 años. El pago lo realizará el Estado mediante un cánon anual (ya definido y creciente con el paso del tiempo), durante toda la duración del contrato.

Calle de Ordoño II, en León
(JMBigas, Junio 2011)

En otras palabras, la empresa que resulte adjudicataria deberá construir la autovía y garantizar su explotación y conservación (incluyendo, por ejemplo, los tratamientos invernales que sean necesarios) durante 30 años. A cambio, cobrará un primer plazo anual de unos 39MEuros, y así sucesivamente durante todo el período. Lógicamente, los costes de financiación acaban siendo enormes, pero las telarañas en caja obligan a estos complejos equilibrios.Salí de Zamora antes de las nueve de la mañana, con la reserva de la gasolina encendida. Confiaba encontrar una estación de servicio con prontitud. Abordé la N-630 (a la que la nueva autovía vendrá a sustituir o complementar) y en el horizonte inacabable de los campos de cereal o de pastos para el ganado, no se veía la más mínima señal de una enseña petrolera. Afortunadamente, conseguí llegar hasta la estación de Montamarta (en dirección a Benavente y León), sin agotar las reservas.

Diversas panorámicas del Embalse del Porma o Mar de Vegamián
(JMBigas, Agosto 2011)

En el nudo de Benavente ya enlacé con la A-66 hacia León. En una anterior visita a León, había descubierto una tienda de productos gourmet (Artesa, en Ordoño II, 27) que quería visitar de nuevo. En esa zona es prácticamente imposible aparcar en la calle, pero afortunadamente existe un parking público subterráneo, por una de cuyas salidas peatonales se aparece justo frente a esa tienda. Compré algún vino de León (Prieto Picudo, Mencía), un chorizo picante y algo de cecina.La siguiente etapa para ese día era un pueblín camino de Boñar, donde mi buen amigo L. estaba pasando unas vacaciones estivales con su mujer, en la casa familiar. No había estado nunca antes, pero llegué sin dudarlo (gracias al GPS y a algunas indicaciones de mi amigo). Charlamos un buen rato en el patio, tomando un aperitivo (la mañana estaba fresca, pero soleada). Durante la comida hablamos de mi siguiente etapa, para ir al Norte hacia Asturias con destino Gijón. La primera opción, la más evidente y posiblemente también la más rápida, era regresar a León para enlazar de nuevo con la A-66 hacia el Túnel de Pajares. Pero me daba pereza volver por donde había venido, y decidí investigar una ruta alternativa.

La Peña Susarón (1.878m), desde el Embalse del Porma
(JMBigas, Agosto 2011)

Desde Boñar, la carretera (LE-331) se dirige francamente hacia la cordillera, para cruzarla por el Puerto de San Isidro (donde hay una importante estación invernal para la práctica del esquí), e internarse en Asturias. Aunque no tenía referencias directas, decidí arriesgarme a tomar ese camino, sin duda más lento, pero que auguraba espléndidos paisajes.A media tarde me despedí de mis amigos en el pueblín, y enfilé hacia Boñar y los Picos. La carretera sigue el valle del río Porma, y cerca de Puebla de Lillo pasa junto al embalse del Porma, el segundo más grande de la provincia de León, inaugurado en 1968. Su nombre oficial es Embalse Juan Benet (pues fue este ingeniero y escritor madrileño su constructor), pero a menudo se hace referencia a él como el Mar de Vegamián. El paisaje allí es delicioso, de alta montaña, con la Peña Susarón (1.878m), uno de los picos más elegantes y famosos de la montaña leonesa (sic. lasendadelhayedo) en el horizonte.

Descenso desde el Puerto de San Isidro hacia Asturias
(Fuente: Panoramio - Barbadillo)

La carretera cruza a continuación Puebla de Lillo. Allí se puede escoger ir por la derecha (LE-331) hacia el Puerto de Tarna, o hacia la izquierda (LE-332) hacia San Isidro. Tomé la 332, y la carretera se va encaramando hacia las alturas de San Isidro, por entre montañas que, incluso en pleno Agosto, uno se imagina nevadas. Se pasa por el pueblo de Isoba y se llega luego a la estación invernal. El Puerto de San Isidro permite cruzar hacia Asturias en los 1.520m. de altitud. Tras coronar el puerto, la carretera (AS-253) se despeña por la cornisa de las empinadas montañas de valles angostos, donde se tienen panorámicas dramáticas.Tras descender por debajo de los 700m. se cruza el pueblo de Felechosa. La carretera continúa por el valle y va cruzando pequeños pueblos (Pola del Pino, Llamas, Collanzo,...), hasta llegar a Cabañaquinta. Allí se bifurca a la derecha la AS-252 hacia Pola de Laviana, y la AS-112, que va siguiendo el valle, hasta juntarse con el tronco de la A-66 a la altura de Valdeoreyo. La Autovía de la Plata sigue desde ahí hacia el norte, paralela al río Caudal (afluente del Nalón).

Elogio del Horizonte. Escultura de Eduardo Chillida en
lo alto del Cerro Santa Catalina, Gijón
(JMBigas, Agosto 2011)

En las cercanías de Mieres, la autovía se bifurca, y la AS-1 (o Autovía Minera) sigue el camino por Langreo y Siero hacia Gijón; mientras que la A-66 sigue su camino hacia Oviedo y a juntarse con la A-8 (Autovía del Cantábrico) cerca de Espín.Tardé algo más de dos horas en ir desde Boñar hasta Gijón (unos 130Km, por esta ruta). En Gijón me recibió un atardecer desapacible, ya que se había levantado un fuerte viento.Pero esa ya es otra historia.JMBA