Pocos saben que la calle está dividida en cinco partes; si comienzas a caminar desde la Plaza de Cataluña, la primera es la Rambla de Canaletes que recibe su nombre de una fuente de la que se cuenta que quien beba su agua volverá a visitar la ciudad; la segunda es la Rambla dels Estudis o Dels Ocells (de los pájaros) porque venden todo tipo de pájaros para los que piensan que amarlos es tenerlos enjaulados, así como mascotas varias que corren la misma suerte.
La tercera es la Rambla de Sant Josep o de Les Flors, por sus coloridos puestos de flores; termina en el Pla de l'Os donde empieza la siguiente Rambla, la dels Caputxins, con un colorido mosaico en el suelo de Joan Miró; ésta es la parte de los músicos callejeros y las estatuas humanas. Finalmente, está la Rambla de Santa Mónica, donde se encuentran los pintores callejeros; es una zona más peligrosa al estar cerca del puerto, pero si se va con cuidado con la cartera no pasa nada.
Si leyendo ésto alguien cree que las ramblas se ve en una hora está muy equivocado. A lo largo de su trazado encontrará La Iglesia de Betlem, El Palau de la Virreina, el Mercat de la Boqueria, la Casa Bruno Quadros, El Gran Teatro del Liceu... ¿sigo?
Si uno no ha visitado nunca la ciudad condal debe planificar una escapadita de varios días tras haber reservado en alguno de los aparthoteles baratos en Barcelona. O eso o beber el agua de la fuente de Rambla de Canaletes.