DEBATES SÍ, DEBATES NO
Lo primero que quiero decir al escribir estas líneas es que son las ocho y media de la mañana de la jornada de reflexión, pero como no creo que me de tiempo a publicar no creo que esté cometiendo ningún delito y no creo que la ahora famosa junta electoral vaya a denunciarme.
Por cierto, escribo en España que mañana tenemos elecciones generales y aún no sé a quién voy a votar o si voy a hacerlo, y digo todo esto para que le gente que lea la opinión se sitúe en el momento en el que la estoy escribiendo, para que no hayas malos entendidos con nadie luego si gana las elecciones uno o el otro.
Dicho todo esto, me meto en harina con todo el tema del debate de las elecciones y de mis dudas a la hora de si votar o no.
Soy una persona que si me tuviese que definir de alguna manera política diría que soy de centro, y si me apuras mucho diría que un poco más de centro izquierda que de centro derecha, y aún así lo único que tengo claro es que no voy a votar al partido que se supone que representa esa opción política, porque esos señores que decía hace un par de años que era antidemocrático no debatir, ahora usan una institución pública en beneficio propio para poder tener una excusa para poder ser antidemocrático. Me ha parecido de auténtica vergüenza toda la polémica que ha habido entorno al debate sí o debate no, y vergüenza sólo para uno de los partidos, que encima es el que lidera las encuestas y el que se supone que tiene más opciones de presidir.
Si al final el PSOE de Pedro Sánchez gana las elecciones, va a ser la mejor demostración de que vivimos en una sociedad más de twiter que de libros, en la que mandan más las frases manidas y los estereotipos que los contenidos reales y la coherencia, y me parece que si al final Pedro Sánchez gana las elecciones, de verdad va a ser una clara alarma de que hay que hacer una reforma en educación, porque las humanidades para enseñar a los niños a tener pensamiento crítico están pidiendo a gritos a la gente que empiece a usar la cabeza.
Y con esto no digo que no haya gente que no pueda votar al actual presidente del gobierno usando la cabeza, estoy segura de que mucha gente lo hará pensando en que saben que este hombre es un trilero bastante malo, pero que aún así, en su afán por pensar que puede engañar a la gente muchos piensen que van a salir beneficiados, como por ejemplo los fabricantes de pan de centeno. Pero creo que por desgracia vivimos en una sociedad con tan poco pensamiento crítico, que la mayoría de gente que le vote son los que tienen una pastilla en el botiquín para curarse del ébola, otra para la gripe aviar y que están metiendo todo su dinero en un fondo de pensiones porque en la sexta y en la cuatro dicen que van a desaparecer las pensiones. Dios que daño hacen la sexta y la cuatro.
Pero claro, en esta la sociedad más libre que hemos tenido nunca, y a la vez la más intolerante también hay que ser de un equipo de otro. Y si por un lado tienes cadenas de televisión vendiendo bajo la bandera de que son los más abiertos de mente, algo tan poco democrático como que ser conservador es una enfermedad a la que hay que empezar a buscar vacuna (creo que los de la sexta han contratado al mismo laboratorio ruso que busca una vacuna contra la homosexualidad), es normal que haya gente que a la vez se pueda sentir como un bicho raro por tener dudas sobre si el aborto debería ser una última opción y no un método anticonceptivo, y entonces empiezan a salir personas enfadadas con el mundo que empiezan a agarrarse a las mismas mentiras pero del otro extremo a Pedro Sánchez, que son las personas que van a votar a VOX por el simple motivo de que es más fácil enfadarse con los progres porque me llaman machista por abrirle la puerta a una mujer en un portal que empezar a pensar.
En mi opinión, hablar de la derechita cobarde da más votos que pedir a la gente que piense, porque vivimos en una sociedad en la que hemos convertido a la política en fútbol, en la que yo soy de mi equipo “man que pierda”, y claro, como todo el mundo quiere ir con el equipo ganador, muchos como borregos a votar a Sánchez para poder sentirse ganadores sin pensar en lo bueno o malo que va a ser para nosotros. Y con esto aprovecho para pasar a decir lo que pienso de los debates de los cuatro equipos grandes de nuestra liga.
Por un lado me parece que lo de Pedro Sánchez es de vergüenza, llegó a un punto en el que es tan claro el intento de manipular a la gente, que además del montón de mentiras que dijo incluso quería manipular a la gente de forma subconsciente, porque de vez en cuando le escuché decir en voz bajita “extrema derecha” cuando hablaban Albert Rivera o Pablo Casado. Me pareció de vergüenza lo de este hombre, y de verdad me aterra que tenga las manos libres para gobernar, porque este tipo es tan ególatra, torpe y manipulador que creo que de verdad es un tío que a largo plazo sería capaz de convertirnos en una Venezuela Europea.
Al día siguiente escuché un programa de radio en el que tiraron de hemeroteca y trabajo de documentación para detectar las mentiras del debate, y el resultado es que los dos que más mintieron fueron Sánchez y Casado.
El segundo del que voy a hablar es de Pablo Casado. No me da ninguna confianza, el primer día me parece que estuvo flojo y me dieron ganas de votar a ciudadanos o a podemos, el segundo día la verdad es que me gustó mucho como habló, alguna medida que prometió me parece que fue muy buena, y siendo un poco coherente y escuchando lo que se trata de decir y no lo que se quiere escuchar, creo que no estuvo mal en decir que con respecto al aborto hay que respetar el derecho de las mujeres a decidir, pero también hay que dar todas las ayudas posibles para que las mujeres puedan también decidir seguir adelante con un embarazo a pesar de estar en una situación precaria económicamente. Creo que con lo que trataba de decir en este momento estuvo brillante, pero claro, al día siguiente escucho con datos que con Pedro Sánchez son los dos más mentirosos, y las posibles dudas de votarle o no después del segundo debate se me quitaron, ya tengo claro que este hombre que no es más que el producto de haber sobrevivido a una pelea de navajas en las primarias del PP es alguien a quien no quiero, y más teniendo en cuenta que de verdad pienso que la única razón por la que Casado manda en el PP es porque los celos hacia Soraya Sáez de Santamaría hizo que se uniesen muchos pesos pesados contra ella.
Yo no sé el resto, pero personalmente yo hecho de menos a Rajoy, tanto en el PP como en el gobierno viendo lo visto, tanto que se crítica a la vieja política, yo soy sincera, las dos únicas personas a las que yo podría votar sin miedos como ahora serían a Rosa Díez, que por desgracia ya no quiere seguir en política activa, o la actual presidenta del congreso, de verdad creo que hoy no hay un solo político que le llegue a la suela del zapato a estas dos mujeres.
El tercero del debate voy a poner al otro Pablo, a Iglesias. Lo primero que tengo que decir es que siento una especial animadversión por este hombre, que no hace tanto tiempo se jactaba orgulloso de vivir en un piso en Vallecas porque él era proletario y ahora no hace falta decir donde vive, que habla de democracia y de feminismo para los demás, pero él en su formación los tiene a todos a su servicio o les corta la cabeza, y pone de portavoz a su “mujercita”. También es una persona que dice de sí mismo ser un trabajador y no pertenecer a la casta, pero qué queréis que os diga, yo vivo en una casa con hipoteca dos personas y un salario mínimo para mantenerlo todo, a mí el señor Iglesias no me da lecciones de lo que es ser proletario, siendo él además de político un funcionario del tipo A.
Y por último para seguir despotricando un poco más, decir que este es el señor que critica la reforma laboral de Rajoy, pero que él en su partido en un ejercicio de democracia ha despedido a todos los afines a ¿errejón? pagando la indemnización mínima que permite la ley.
Como digo tengo cierta animadversión por este hombre, porque me parece que ha jugado con las ilusiones de la gente y eso no se lo puedo perdonar, pero dicho todo esto, también tengo que decir que para mí ha sido el mejor en los debates y si no fuese porque votarle a él es que gobierne Pedro Sánchez, me lo plantearía muy en serio. El primer día fue el segundo que más me gustó, igual que el segundo día, pero como Casado mintió mucho el segundo día, el tercer día le di el primer puesto del segundo día a Pablo Iglesias (¿se me ha entendido?). Creo que estuvo muy bien al matizar que hablar de subir o bajar impuestos no cuenta, sino que lo que de verdad importa es a quién se le baja o sube, pero no me gusta lo del impuesto a la banca, porque igual que los impuestos a la gasolina o a la luz al final los acabamos pagando los mismos siempre, tampoco estoy de acuerdo con que se cobre más del cincuenta por ciento en impuestos a nadie, no porque lo diga Rivera, sino porque a mí me enseñaron en la universidad que eso es confiscatorio y no me parece bien, así que poniendo todo en una balanza no le voy a votar tampoco, si con el tiempo se quita la pose, porque no es más que una pose, de ser proletario a lo mejor me lo pienso para las próximas elecciones, desde luego conmigo ha ganado muchos puntos después del debate, también porque la única mentira del debate que le pillaron en el debate fue con un dato de la tasa de pobreza, que hasta yo entiendo que más que una mentira puede ser que no pase de un error.
Y por último está ciudadanos, este es un partido al que ya he votado antes y la verdad es que me he sentido un poco estafada, porque pensaba que eran los únicos que tenían algo de sentido de estado por encima del beneficio propio, pero llevo un par de años en los que cada vez que veo a Albert Rivera hablando me digo a mi misa “sentido de estado por lo cojones”, siempre me deja la sensación de que no es más que un producto igual que podemos, al que lo único que le cambia es el director de marketing.
Además, creo que hay que liberalizar un poco la economía española, pero sólo un poco, me gusta el contrato único o quitar el impuesto de sucesiones, pero no me gusta nada la economía liberal porque es el sistema de EEUU en el que no hay una sanidad pública en condiciones, no hay pensiones en condiciones, y que si el jefe ese día se levanta cruzado te manda a tomar por culo tan ricamente y legalmente, y tú te vas a vivir debajo de un puente si tienes la mala suerte de que Zapatero se ha cargado la economía de nuevo cuando tú vas al paro, lo siento, pero liberalismo no, gracias. Comunismo para mí tampoco, pero una cosita intermedia como viene en la constitución, poniendo todos un poquito de nuestra parte, y poniendo los políticos sobre todo por delante el interés de los ciudadanos por encima del beneficio electoral, creo que sí es un buen sistema.
Al principio como he dicho, me creí a este partido y pensaba que cosas como los actos que hacen en sitios de españa en los que les chillan eran de verdad una forma de luchar para que todo el mundo pueda ser libre en cualquier sitio de españa, un ejercicio de hacer que las cosas de verdad puedan ser normales en este país, ahora lo que pienso es que buscan que les griten para salir en la prensa.
Así que esta es mi duda con lo que yo veo que en cada uno de si votar o a quien votar, porque lo único que tengo claro es que en blanco no voy a votar, porque para eso prefiero que baje el dato de participación que es la mejor forma de deslegitimar a un presidente y mostrar que no estoy de acuerdo con ninguna de las opciones. Os doy un orden pero no es mi orden ahora mismo, es simplemente una forma de que se me entienda.
1º opción, votar al partido de la marihuana que estaría muy cachondo.
2º votar al PACMA, que a pesar de declaraciones como “es el típico dilema elegir entre tu perro y tu madre…” supongo que darles voz puede ser algo bueno para mejorar el trato a los animales en muchos sitios de españa.
3º votar a un trilero torpe y ególatra, sin el menor escrúpulo en que el paro suba a ocho millones si así sigue en el poder. Puede sonar duro, pero es la sensación que tengo con Pedro Sánchez.
4º votar a un pijo conservador que no sabe lo que es trabajar porque no lo ha hecho nunca fuera de la política y que su gran logro en “su trabajo” sólo ha sido pasar por el sitio adecuado en el momento en el que los demás se mataban entre ellos.
5º votar al “proletario, feminista y verde” que vive en un chalet, llevando a su mujercita siempre de la mano profesionalmente porque no sabe buscarse la vida sola y que tiene “una casa para el servicio” en su propiedad, y que con todo me ha parecido el que de verdad a ganado el debate y el que más me ha gustado.
6º o por último votar a un partido que hace algún tiempo nació en Cataluña para traer la utopía del gobierno de los listos, véase el capitulo de los simpsons en el que un consejo de superdotados se hace cargo de la alcaldía, y que igual que en la serie de dibujos al final se ha quedado intereses propios y punto, son sólo un ejercicio de marketing.
Así que yo en esta jornada de reflexión, esto es lo que voy a hacer, reflexionar, y ya pondré otra opinión si me apetece diciendo lo que he hecho. Teniendo sólo claro que la sociedad liberal y anti-tolerante en la que vivimos, tiene que volver mucho a las humanidades para formarnos además de como sociedad también como personas, que gane quien gane yo me conformo con que no vuelvan a amenazar con pegar a mi marido por tener el pelo corto y llevar y un polo de rugby de la selección española, o que no venga una persona a meterse en una conversación privada mía con una amiga, para insultarme y llamarme fascista por decir que no me parece bien ver a una persona haciendo propaganda del PSOE a la puerta de un colegio electoral un día de elecciones, en un pueblo en el que el alcalde es del PSOE. Simplemente me conformo con que la gente aprenda a que no es ofensivo que el del al lado piense de forma diferente, sea de derechas, de centro o de izquierdas.
Y como se supone que lo dicen las encuestas por si acaso para que no me miren mal los seguidores de la sexta; “ave al líder todopoderoso señor del Falcón que desde los cielos cuidas de nosotros enhorabuena por haber ganado la liga como el barça y nos vemos en europa”.