Los pequeños dibujos que aparecen realmente me parecen demasiado simpáticos. La trama en general me parece buena, pero le falta ese pequeño toque de sentimiento para lograr que los lectores quedamos enamorados de los personajes. Contamos con una narrativa ágil y fluida que podemos disfrutar.
El árbol de arce fue el que logró llamar más mi atención al ser un confidente y amigo con quien platica el personaje principal cuando algo no iba bien. Desde luego, me agrado la manera que la escritora explicó el tema de la muerte. ¿Te imaginas convertirte en un lucero? Y después seguir cuidado desde lo más alto a tus seres queridos. ¡Sería genial!Al final del cuento, la escritora agrego algunas dinámicas, para que los padres de familia puedan realizarlas juntos a sus hijos, además; compartió pequeños consejos que pueden ayudar a los padres que estén pasando por algo similar al cuento.Definitivamente, hay un sinfín de maneras de explicar a un niño sobre la muerte, cada uno dándoles un toque personal con estas historias siempre pienso que podemos sacar las partes positivas a un hecho demasiado triste. ¡Recordemos a nuestros seres queridos con los bellos momentos que nos brindaron!