Tras el triunfo de Mauricio Macri en las elecciones presidenciales de 2015, Espectadores se declaró opositor en nombre del principio de honestidad intelectual que reivindica desde su política editorial, y a contramano de los medios que esconden su ideología detrás de la consigna de objetividad periodística. Un año y medio después, el blog reconoce en el primer tramo de la carrera hacia los comicios legislativos de octubre la necesidad de (volver a) explicitar su lugar de enunciación.
En este 2017 electoral, Espectadores adhiere a la Unidad Ciudadana que Cristina Fernández de Kirchner lanzó el martes pasado. Le interesa especialmente la convocatoria a conformar un frente opositor con miras a instrumentar desde el Congreso de la Nación, las legislaturas porteña y provinciales, los sindicatos y otras instituciones una estrategia política contra la restauración neoliberal que lleva adelante la alianza gubernamental Cambiemos.
El endeudamiento externo récord, el desmantelamiento del sistema de seguridad social, la destrucción del poder adquisitivo, la violación sistemática de convenios laborales, la liberación de las importaciones, el afán regulador a favor de la (re)privatización, la compra con fondos públicos de deuda privada, la intención de convertirnos en supermercado del mundo hacen a la receta económica que Macri y equipo elaboraron –en realidad reeditaron– y aplican para congraciarse con Estados Unidos, sus aliados estratégicos y los organismos internacionales al servicio del statu quo financiero.
La conversión en neocolonia implica acatar la orden de disciplinamiento social que imponen los centros de poder global. En nombre de esta otra obediencia debida, el gobierno macrista prepara el terreno para una reforma educativa nacional destinada a formar recursos humanos en vez de ciudadanos con capacidad crítica. Asimismo abandona políticas públicas de Derechos Humanos, reprime la protesta, ampara y fomenta la difamación mediática y la persecución judicial de adversarios políticos, desatiende el bloque regional conformado sin la tutela estadounidense, suscribe acuerdos que –en nombre de la lucha contra el terrorismo y el narcotráfico– vulneran nuestra soberanía política y jurídica.
A partir de los quince puntos desarrollados en su plataforma, Unidad Ciudadana reconoce esta porción de realidad nacional que los medios de comunicación de alcance masivo desconocen, esconden, distorsionan o visibilizan a regañadientes. También propone líneas de trabajo –a juicio de este blog, pertinentes– para limitar la capacidad de daño de la administración cambista.
Con perdón de los lectores que se sienten identificados con la izquierda antiperonista y antikirchnerista, Espectadores encuentra que ese otro frente opositor tiene una limitada capacidad de convocatoria y acción. Asimismo juega en contra el recuerdo amargo de la conducta de algunos referentes ante el lock out ruralista en 2008, el ballottage de los comicios presidenciales en 2015, la detención de la diputada del Parlasur Milagro Sala en 2016.
Las otras fuerzas opositoras tampoco convencen. Evolución Ciudadana, porque –como dicen por ahí– suena a “versión B de Cambiemos”. El Partido Justicialista y 1País, porque –a juzgar por declaraciones como ésta y ésta– parecen más preocupadas por complicar el regreso a la arena política de CFK que por detener las políticas perversas del macrismo.
En abril de 2015 y en mayo de ese mismo año, Espectadores expresó su apoyo electoral al entonces pre-candidato presidencial del Movimiento Evita, Jorge Taiana, y a la entonces pre-candidata a jefa de Gobierno porteño por Nuevo Encuentro, Gabriela Cerruti. Dos años después, celebra que estos dos referentes kirchneristas vuelvan a postularse, el primero, como candidato a senador nacional por la Provincia de Buenos Aires, la segunda, como candidata a diputada nacional por la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.