Deja la vida en paz

Por Juanmarodriguez @juanmariarm

Quieres que todo lo que gira a tu alrededor, siga el compás de la música que acompaña tu vida.

Nada te alegra más, que sentir la seda que te envuelve, esa que acaricia tu tranquilidad y ahuyenta tus temores, tus miedos.

Sueñas con ver que el más grande de los océanos se convierte en una tranquila laguna, en la que el agua refleja la paz del “todo” controlado. Sus olas serán recuerdos que poco a poco perderán fuerza en tu mente.

Buscas controlar lo incontrolable. Ofreces ayuda al que no te la pide. Construyes tu vida con ladrillos dejados por otros.

Te exiges que todos a tu alrededor estén bien. Inviertes una alta cantidad de energía en cumplir una misión imposible. No entiendes que si no están bien, no puedes hacer nada. No entiendes que no estar bien, es parte del juego.

Lanzas gritos de esperanza, deseando llegue el día en el que de tus hombros cuelgue la capa de “Salvador del Mundo”, esa que te dará el poder suficiente para ayudar a todos los que te rodean de una manera sencilla, no como ahora.

Ahora, llevas colgada una mochila que poco a poco lastima tu espalda. Mochila llena de culpa. Sin saberlo, vives rodeado de “culpa”. Te proclamas responsable de las decisiones de los otros. Además, asumes que también eres el culpable de las situaciones que esas elecciones traerán a la vida de ellos.

Puede que te lleve tiempo saber que solamente eres responsable de tus elecciones y de tu vida. Muchos son los que dejan este mundo sin conocer tan grandioso descubrimiento.

Otros aún sabiéndolo, miran hacia otro lado pues sienten que es más cómodo vivir preocupados por marcar el camino de los demás, que bucear en la incomodidad de su propio interior. Sienten miedo de mirar hacia dentro.

Vives mirando hacia fuera por temor a lo que puedas encontrar dentro. Ignoras que esa mirada interna, te llevará a limpiar tu “culpa”.

No necesitas una capa colgando de tus hombros para ser el “Salvador del Mundo”. Te basta con una esterilla para sentarte y convertirte en el “Salvador de tu vida”.

“Deja la vida en paz. Déjala ser”. (Eckhart Tolle)